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A sus 123 años, Henry es el cocodrilo más antiguo del mundo y es una auténtica maravilla

Henry, el cocodrilo más antiguo del mundo

elEconomista.es

En el mundo de los reptiles, pocos animales pueden presumir de una longevidad como la de Henry, el cocodrilo más viejo del mundo conocido, que recientemente cumplió 123 años. Este imponente ejemplar de cocodrilo del Nilo vive en el parque Crocworld Conservation Centre, en la provincia de KwaZulu-Natal, Sudáfrica, donde se ha convertido en una de las principales atracciones por su historia y su imponente tamaño.

Henry no solo destaca por su increíble longevidad, sino también por su impresionante tamaño. Con un peso de más de 500 kilos y una longitud que supera los cinco metros, este cocodrilo es una verdadera "unidad", como se le ha descrito en algunos medios. Su edad es realmente sorprendente, ya que la mayoría de los cocodrilos del Nilo en la naturaleza no suelen vivir más de 70-100 años. Sin embargo, Henry ha superado con creces esa expectativa de vida, lo que lo convierte en un espécimen excepcional tanto en su especie como en el reino animal en general.

Su historia y llegada a Crocworld

Henry llegó a Crocworld en 1985, cuando tenía aproximadamente 85 años, según los registros del parque. En ese momento ya era conocido por su impresionante tamaño y su capacidad para sobrevivir en ambientes desafiantes. Desde su llegada, ha prosperado en su nuevo hogar, donde ha disfrutado de una vida sin depredadores naturales y con el cuidado especializado que le proporciona el personal del parque.

Uno de los aspectos más fascinantes de la vida de Henry es su fertilidad y vitalidad a lo largo de las décadas. Se le atribuyen al menos 10 crías en Crocworld, y su descendencia sigue prosperando en el parque, lo que añade otra capa de interés a su ya fascinante biografía.

Un símbolo de resiliencia y conservación

El equipo de Crocworld ha asegurado a los entusiastas y seguidores de Henry que el cocodrilo continúa gozando de buena salud, desmintiendo cualquier rumor sobre un deterioro físico relacionado con su avanzada edad. Aunque es natural que un animal de su longevidad necesite un monitoreo regular, Henry sigue mostrándose fuerte y activo, lo que ha sido motivo de orgullo para los cuidadores del parque.

Además, la historia de Henry ha servido como inspiración para fomentar la conciencia sobre la conservación de los cocodrilos y otras especies en peligro. Crocworld ha utilizado la popularidad de Henry para educar al público sobre la importancia de preservar los hábitats naturales de los cocodrilos del Nilo y otras especies amenazadas.

Un atractivo turístico mundial

La fama de Henry no se limita a Sudáfrica. Su longevidad ha captado la atención internacional, atrayendo visitantes de todas partes del mundo que desean ver a este impresionante cocodrilo en persona. Crocworld ha lanzado campañas para atraer a más "amigos de Henry", que pueden seguir sus aventuras a través de las redes sociales y recibir actualizaciones sobre su vida en el parque.

Henry también ha sido protagonista de diversas investigaciones sobre la longevidad en reptiles, aportando valiosos datos que podrían ayudar a los científicos a entender mejor los procesos de envejecimiento en los animales. Su caso plantea preguntas sobre cómo ciertas especies pueden superar las expectativas de vida en entornos controlados y protegidos, lo que podría tener implicaciones para la conservación de otros animales longevos.