Alerta por sequía: Altea prohíbe llenar las piscinas en su urbanización más exclusiva

Los efectos de las escasas precipitaciones en determinadas zonas de la Comunidad Valenciana y la llegada del verano, con el incremento de la población en muchas zonas turísticas, ya están obligando a los ayuntamientos a tomar medidas para limitar el consumo y tratar de garantizar el suministro básico, como la prohibición de llenar las piscinas.

El alcalde de Altea (Alicante), Diego Zaragozí, ha emitido un bando de urgencia que supone restringir el uso del agua de la red de suministro potable para determinadas actividades en varias zonas del municipio ante la sequía. En concreto se prohíbe el riego de jardines, huertos, terrazas, zonas verdes y deportivas, de carácter privado o público; llenado de piscinas, estanques y fuentes, privadas o públicas y limpieza y baldeo de viales, calles, sendas y aceras, de carácter público o privado, según informa el propio consistorio.

Unas medidas excepcionales que se aplican al abastecimiento en los ámbitos territoriales del municipio de Mascarat, Alhama Candela, Sierra Altea II y la Malla, que incluye una de las urbanizaciones más lujosas y exclusivas de la localidad costera, Altea Hills.

Según el propio edicto, la medida se debe a la sequia que se padece desde estos últimos meses y al aumento del consumo del agua en verano en este municipio de la Costa Blanca. La decisión de tomar estas medidas excepcionales y preventivas precisamente focalizadas en esas zonas de urbanizaciones en la zona más elevada del municipio se debe a que se busca mantener el volumen de los pozos de la Sierra que son los que la suministran.

La situación hídrica de La Marina Baja, la comarca en la que se ubica Altea, es preocupante desde hace meses y ya ha provocado daños a los viticultores del norte de Alicante.

Precisamente el último informe de seguimiento de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) con los datos de junio incluye la entrada de la Marina Baja en emergencia por escasez hídrica. Además, los mismos indicadores han empeorado en otros sistemas, como en el Vinalopó-Alacantí y Serpis, que pasan a situación de alerta por escasez hídrica.

Respecto a la Marina Baja, el presidente de la CHJ, Miguel Polo ha señalado que el abastecimiento urbano está "garantizado" gracias a la planta desalinizadora de Mutxamel y a las plantas desalinizadoras de la Mancomunidad de Canales del Taibilla. De igual forma, ha recordado que el abastecimiento urbano es una "prioridad" para la Confederación y que solo se contemplan restricciones en el regadío.

El Organismo insta a los municipios de más de 20.000 habitantes a poner en marcha las medidas contempladas en sus planes de emergencia ante situaciones de sequía, e invita a las localidades de menor población a impulsar medidas de ahorro similares. En el ámbito urbano, se recomienda la reducción de usos no esenciales, como las fuentes ornamentales o el baldeo de calles, reduciendo al mínimo el riego de jardines y hacerlo de noche, limitar o prohibir el lavado de coches o el llenado de piscinas, reducir la presión en la red en horario nocturno para evitar las fugas, así como ponerse en contacto con grandes consumidores industriales u hoteleros para reducir en la medida de lo posible el consumo.

El norte de Castellón, otro punto seco

Además los problemas se siguen acumulando en Castellón, donde sistemas como el Cenia-Maestrazgo en el norte o el Palancia continúan en "una situación crítica", según la CHJ.

La Generalitat Valenciana ha firmado el contrato de ejecución de las obras necesarias para garantizar el abastecimiento de agua en los municipios castellonenses de Canet lo Roig, La Jana y Traiguera, ante la situación excepcional de sequía.

Esas actuaciones contemplan una inversión de 4,2 millones de euros en un plazo de 8 meses. Está previsto que las obras, que realizará la empresa Pavagua Ambiental, empiecen este mismo mes.