¿Leonor recibirá un sueldo tras la jura de la Constitución?

La jura de la Constitución por parte de la princesa Leonor, más que un acto institucional, representa una de las obligaciones que aparece en el artículo 61 de la Carta Magna. Además, tiene una trascendencia importante en cuanto a las responsabilidades a asumir por la princesa.

Una de ellas tiene que ver con el sueldo de la princesa Leonor. Hasta ahora, estaba bajo el amparo de la Casa Real, ya que era menor de edad. Sin embargo, tras la jura de la Constitución, que llega con motivo de su 18 cumpleaños, tendrá tareas y responsabilidades propias, por lo que podría cobrar un sueldo por ello.

¿Tendrá un sueldo la princesa Leonor?

Aunque hay algunas tareas que no son delegables y que siguen perteneciendo al rey, como la promulgación de leyes o la convocatoria y disolución de las Cortes, entre otras, hay algunas tareas que Felipe VI podrá traspasar a su hija.

De hecho, será el propio Felipe VI el que decida qué actos y tareas corresponderán a la princesa tras su mayoría de edad y, también, si cobrará o no un sueldo por ello, que saldría de la asignación recogida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Los PGE recogen todos los años la partida que va destinada a la Casa Real. En concreto, para el año 2023 se indica que el presupuesto es de un total de 8.431.150 euros, una cantidad que se reparte de la siguiente forma:

• 56,25% - Familia real y gastos de personal
• 32,89% - Gastos corrientes y bienes y servicios
• 8,85% - Inversiones
• 1,99% Fondo de contingencia
• 0,01% - Gastos financieros

Teniendo esto en cuenta, será el rey el que decida si su hija pasa a cobrar una asignación por la realización de funciones extra a partir del acto de este martes, aunque es posible que su agenda se mantenga como hasta ahora, centrada en su formación militar y universitaria, a la espera de su momento para convertirse en reina del país.

De hecho, tal y como se puede ver en la página de transparencia de la Casa Real, Felipe VI no empezó a cobrar una cuantía por sus labores hasta que no cumplió los 30 años de edad. En ese momento, pasó a cobrar "como dotación personal y gastos de representación" la mitad de las cuantías asignadas a su padre, Juan Carlos I.

Como curiosidad, en el año 2011, primero de los que hay registros en el portal de transparencia, tanto la reina Sofía como la princesa de Asturias y las infantas Cristina y Elena, disponían "únicamente" de gastos asignados de representación "en la proporción y cuantías que para cada ejercicio, atendiendo a las circunstancias". Dicha cantidad para el 2011 no podía superar los 375.000 euros.