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Rubiales presentará este viernes su dimisión como presidente de la RFEF
- El expediente disciplinario de la FIFA ha sido la gota que ha colmado el vaso
María Juárez
La etapa de Luis Rubiales al frente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha llegado a su fin. El todavía presidente presentará este viernes su dimisión en la Asamblea Extraordinaria de la Federación, según han indicado fuentes cercanas a su equipo. Desde que el presidente ocupó el cargo en mayo de 2018 ha protagonizado múltiples escándalos, entre los que destacan el viaje a Nueva York o la Supercopa de Arabia y su negocio con Piqué; sin embargo, ha sido el beso que le dio a la futbolista Jenni Hermoso tras alzarse como campeonas del mundo lo que le ha costado a Rubiales su puesto y su sueldo de casi 700.000 euros.
La gota que ha colmado el vaso ha sido la apertura de un expediente disciplinar por parte de la FIFA. La organización, a través de su Comisión Disciplinaria, asegura que "estos hechos podrían resultar constitutivos de violaciones de los artículos 13.1 y 13.2 del Código Disciplinario de la FIFA". No obstante, la organización no ofrecerá más información hasta que no se haya tomado una decisión. Con esta medida la FIFA reitera su compromiso inquebrantable de respetar la integridad de todas las personas y condena enérgicamente cualquier comportamiento contrario. De hecho, el pasado miércoles, la propia implicada emitió un comunicado, en el que aseguraba que "mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto."
Además, a pesar de la convocatoria de una Asamblea General urgente, Rubiales ha acabado solo. De hecho, todos los clubes de Primera División habían anunciado que no acudirían. El primero en pronunciarse fue la Federación de Fútbol del País Vasco que anunció que no acudirá a la Asamblea y añadió que, dependiendo de lo que ocurra en las próximas jornadas, tomarían una decisión sobre la continuidad del presidente en la Junta Directiva de la RFEF. Luego se sumaron los clubes. Getafe, Osasuna y Real Sociedad, catalogando los hechos protagonizados por Rubiales como "gravísimos". De hecho, el presidente de la Real, Jokin Aperribay, en Radio Euskadi, aseguró que "esto se tendría que haber terminado hace días". Asimismo, el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, que comparte la opinión de sus colegas, agregó en Jugones de La Sexta que "todos debemos ser conscientes con lo que hacemos y decimos. Tendrá que hacer lo que considere oportuno, pero yo creo que lo oportuno es presentar su dimisión".
Una semana de críticas
El presidente lleva toda la semana recibiendo críticas y peticiones de que abandone su puesto en la Federación. Sindicatos como UGT han asegurado que "la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol, con tan alta responsabilidad, no puede ser ocupada por quienes siguen ejerciendo este tipo de comportamientos, propio de las cavernas y contrarios a nuestra normativa legal y a los principios de igualdad irrenunciables de nuestra sociedad del siglo XXI". CCOO, por otro lado, calificó como una "agresión sexual" que evidencia "la inequidad entre deportistas profesionales mujeres y hombres, entre formaciones femeninas y masculinas".
Desde el Gobierno tampoco se han quedado atrás. El presidente en funciones, Pedro Sánchez, aseguró en una rueda de prensa que "lo que vimos fue un gesto inaceptable. Creo que las disculpas que ha dado no son suficientes, hasta incluso creo que no son adecuadas y que por tanto tiene que continuar dando pasos para aclarar lo que vimos todos". Sumar, el partido político encabezado por Yolanda Díaz, interpuso una demanda ante el Consejo Superior de Deportes (CSD) y ha pedido que sea apartado de su cargo y "que se ponga en marcha el protocolo de actuación frente a la violencia sexual", según informó en sus redes sociales Marta Lois, diputada y portavoz de la formación política. Sumado a esto, el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ha anunciado que el CSD llevará ante el TAD la actuación de Rubiales la semana que viene.
Otra de las organizaciones que también exigió su dimisión fue Fasfe, Accionistas y Socios del Fútbol Español, que aseguraban que, aunque "desconocemos el alcance disciplinario o incluso penal que puedan tener estos hechos, pero independientemente de ello creemos que Luis Rubiales no puede seguir dirigiendo y representando a nuestro fútbol".