Actualidad

La última decisión del CEO que invierte millones en acortar su edad biológica: Byran Johnson se inyecta la sangre de su hijo de 17 años

Foto: Bloomberg.

Cristian Gallegos

Byran Johnson no tiene límites. Hace unas semanas contábamos su estricto y millonario régimen que sigue para acortar su edad biológica a 18 años. Hoy es noticia nuevamente, porque a ese estricto régimen de rejuvenecimiento le está agregando un "condimento" que tiene que ver con la sangre de su padre y con la de su hijo, de 70 y 17 años, respectivamente.

La frase "el dinero todo lo puede" se cumple al completo en la vida de Byran Johnson, multimillonario y CEO de Kernel, una empresa que puede monitorear y registrar la actividad cerebral. Por estos días, el empresario de 45 años vuelve a estar en las portadas de los medios económicos por las últimas decisiones que está tomando respecto a su régimen de rejuvenecimiento por el que invierte más de 2 millones de euros al año.

En una entrevista a Fortune, Johnson describió las rígidas intervenciones médicas que ha recibido que, a día de hoy, "le dan una salud cardiaca de un hombre de 37 años, la piel de una persona de 28 años y la capacidad pulmonar de un joven de 18".

En la entrevista, el empresario y CEO de tecnología explicó que "quiere vivir mucho tiempo para disfrutar más de lo que ofrece la vida", a partir de un costoso régimen de rejuvenecimiento.

Plan de "eterna juventud"

En este contexto, y siguiendo con su plan de "eterna juventud" el empresario está aplicando nuevas técnicas de antienvejecimiento. De esta forma, Johnson decidió aplicar a su tratamiento la sangre de su hijo de 17 años y la de su padre de 70.

"Hay una fascinación pública de larga data con las historias de tipos tecnológicos adinerados que se inyectan los preciosos fluidos corporales de las personas más jóvenes", señala una reciente publicación de Bloomberg.

Carencia científica

En esta línea, los experimentos en ratones han sugerido que los roedores mayores experimentan efectos rejuvenecedores al absorber la fuerza vital de sus contrapartes más jóvenes.

Inspirados por estos resultados, algunas personas, como Johnson, han optado por experimentar en sí mismos y aprovechar esta fuente de la juventud que suena vampírica, aunque, cabe señalar, la ciencia aquí está todo menos establecida.

Para el CEO de Kernel, el intercambio de plasma no es un acontecimiento inusual. A lo largo de su estadía en una clínica en Dallas, recibió plasma de un donante joven. Para aplicarse la sangre, Johnson evaluó previamente al donante para asegurarse de que tuviera un índice de masa corporal ideal, llevara un estilo de vida saludable y no tuviera enfermedades.

Sangre generacional

En esta oportunidad, el trío generacional se sometió a las transfusiones en la misma clínica de Dallas. Tanto como al padre de Johnson, como a su hijo, se les extrajo un litro de sangre y con una máquina especial se separó: un lote de plasma líquido y luego un lote de glóbulos rojos, glóbulos blancos células y plaquetas.

El tratamiento, a priori, es simple. Ambas sangres se introducen en las venas de Johnson con el objetivo de rejuvenecer y reparar los daños celulares provocados por el proceso de envejecimiento biológico natural de él mismo y, con ello lograr su objetivo de parecer un joven de 18 años.