Así hizo su fortuna Nayib Bukele: el presidente 'cripto' de El Salvador
- De familia de origen palestino y con inicios empresariales en el mundo del motor, Bukele apostó casi todo en su país a bitcoin
Víctor Millán
Hace un año copó titulares. El Salvador se convertía en el primer estado en adoptar el bitcoin como moneda de curso legal. La decisión se amparaba supuestamente en la enorme dependencia que tenía el país de las remesas de sus expatriados en dólares. Tras la decisión, su polémico nuevo presidente, Nayib Bukele, convertido en ese momento en ídolo del mundo cripto mientras el resto del mundo miraba la decisión con extrañeza.
Hoy bitcoin ha perdido el 50% de su valor, trasladando esta caída a las reservas que El Salvador había depositado en forma de esta criptomoneda. Bukele, tan polémico como adorado a partes iguales, sigue defendiendo su apuesta. Aunque, si algo es cierto, es que la económica de Bukele está muy lejos de la del pueblo medio salvadoreño, uno de los países con más diferencias por ingresos según el Banco Mundial.
¿Cómo hizo su fortuna Bukele?
Nayib Bukele nació como Nayib Armando Bukele Ortez el 24 de julio de 1981 en San Salvador, de padre musulmán, llamado Armando y madre cristiana Olga. Es descendiente de palestinos por parte de su padre. De joven, Bukele fue a la Universidad Centroamericana, donde estudió Derecho. Finalmente, abandonó los estudios para hacerse cargo de una de las empresas familiares. Más tarde, sería propietario de la licencia de Yamaha Motors en El Salvador durante un tiempo.
El padre de Bukele fue uno de los primeros imanes de América Latina e impulsor de varias de las mezquitas que se construyeron en los 80 en el continente latinoamericano, actividad que compaginó con una importante flota empresarial.
Bukele comenzaría a trabajar a los años en Obermet, agencia publicitaria también propiedad de su padre y, después, en la agencia multinacional Saatchi & Saatchi. En ambas Bukele fue director y las agencias se hicieron cargo del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), partido del que después Bukele formaría parte.
Según el Portal de Transparencia de El Salvador, Bukele cobra un salario anual de aproximadamente 60.000 dólares, y cuenta con un patrimonio superior a los 2,5 millones de dólares.
Así creció su carrera política
Bukele comenzó su carrera política cuando fue elegido alcalde del municipio Nuevo Cuscatlán en 2012. Durante su mandato, proporcionó a todos los adultos mayores de 55 años de la ciudad un paquete mensual que cubría las necesidades nutricionales esenciales. Además, ofreció becas a todos los estudiantes con un promedio superior a 3,5 para asistir a cualquier universidad del país. También fue significativo que la tasa de homicidios en Nuevo Cuscatlán disminuyera durante los tres años de mandato de Bukele.
En 2015, Bukele se convirtió en alcalde de San Salvador, superando al empresario Edwin Zamora. Entre los aspectos más destacados de este mandato se encuentra la modernización de la infraestructura de la ciudad por parte de Bukele, incluyendo la ampliación de las carreteras y la reconstrucción de las líneas de telecomunicaciones.
En 2017, Bukele fue expulsado del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, uno de los principales partidos políticos de El Salvador. Esto ocurrió en respuesta a las acusaciones de que estaba sembrando la división interna en el partido.
Tras esta expulsión, Bukele decidió presentarse a las elecciones presidenciales como independiente, enfatizando su discrepancia con el sistema político dominante. Para ello, creó el partido político Nuevas Ideas; sin embargo, el Tribunal Supremo salvadoreño no dio legalidad al partido. Posteriormente, Bukele se unió al partido de centro-derecha Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA).
Ganó las elecciones presidenciales en 2019, convirtiéndose en el primer candidato salvadoreño desde los años 80 en ganar la presidencia sin representar a uno de los dos principales partidos del país.
Desde entonces, Bukele ha protagonizado titulares por su apuesta por el bitcoin que, de momento, no ha salido bien, junto con otras polémicas como ser acusado de pactar con las Maras para frenar la violencia en el país.