El mes de febrero es crucial para las estrellas más famosas del celuloide. Un mes lleno de glamour en galas en las que las decisiones en lo que a vestimenta se refiere son cruciales. Los premios Bafta y Grammy nos han dejado un revuelo de alta costura con looks deslumbrantes como el de Rihanna o Jessica Chantain y otros menos llamativos, aunque igualmente acertados, como el de Beyoncé o el de Jennifer Lawrence.

En los premios de la música, los Grammy, hemos podido ver outfits de todas las clases y colores. La mayoría de los artistas marcaron su personalidad sobre la alfombra roja, pero no todos acertaron. Como siempre Taylor Swift está en la lista de las mejores vestidas por su buena capacidad de elección. En esta ocasión optó por un vestido de corte helénico, de color blanco perla y con la espalda al aire cruzada con tiras. Muy elegante y favorecedor para la cantante, que lo combinó con un moño bajo y una trenza cruzada que dejaba a la vista la peculiar espalda del modelo.

Otro gran acierto fue el de la cantante Rihanna que, alejándose de sus looks agresivos, optó por un modelo más glamouroso propio de una gran artista de cine. El vestido color rojo valentino con una larga cola favoreció mucho a la de Barbados. Para el pelo eligió ondas suaves y largas estilo romántico que combinó con un maquillaje sencillo, resaltando sus labios.

El vestido de Carrie Underwood, sin duda ,fue una apuesta segura: negro, encaje y transparencia, con un corte ajustado que marcaba su figura. Pero Carrie no solo deslumbró en la alfombra roja, sino que durante su actuación sorprendió a todo el mundo con un vestido proyector. Al escenario salió con lo que parecía un simple outfit blanco que, a medida que se desarrollaba la actuación, proyectaba diferentes imágenes de lo más originales dejando a todo el público atónito.

Estos tres modelos muestran claramente la nueva tendencia de transparencias que se está apoderando de las celebrities en todos los actos importantes de la industria musical y cinematográfica.

Pero no todas han sabido llevarla y si no que se lo digan a Kelly Rowland o a Alicia Keys. Aunque ambos vestidos favorecían a sus portadoras, las artistas provocaron más de la cuenta con sus atuendos.

Otra que acertó con el look fue la cantante Adele, ataviada con un vestido de estampación de flores de diferentes rojos. El corte le favorecía aunque los zapatos, del mismo estampado que el vestido, perdían protagonismo; la artista Kerli dejó mucho que desear con su look estilo kimono de dos piezas con el que imitaba a Lady Gaga.

Katy Perry o Beyoncé hicieron gala de dos modelos sencillos pero con mucho glamour. Beyoncé optó por un dos piezas bicolor y asimétrico muy discreto, mientras que Perry eligió un vestido color verde con un escote muy pronunciado.

Con un estilo totalmente diferente vistieron las famosas que acudieron a los premios Bafta. Mucho más glamour y elegancia se pudo observar entre las celebrities asistentes a este evento.

Sin duda, Jessica Chantain acertó con el azul eléctrico de su vestido que resaltaba el tono de su piel y el color rojizo de su pelo.

Al igual que en los Grammy, en los Bafta destacaron las transparencias. A Gemma Artenton le sentaba perfecto su vestido de tiras negras y transparentes de corte largo y asimétrico.

Marion Cotillard también acertó con el vestido amarillo chillón con el que pisó la alfombra roja.

Elegancia es la palabra que define a los looks de Anne Hathaway y Jennifer Garner. Las dos eligieron el color negro, Hathaway con un vestido de encaje e corte largo y Garner con un dos piezas black&white.

En esta edición las famosas que no supieron sacarse partido fueron Jennifer Lawrence que, aunque con un vestido impresionante, no escogió el tono adecuado; y Elizabeth Olsen, cuyo modelo incluía demasiados brillos.

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