El aceite de oliva virgen extra ha compuesto una cultura en sí mismo, que ha derivado en una divulgación no solo para los expertos y especialistas en gastronomía, sino para cualquier persona con inquietudes, en lo que se ha venido a desarrollar como oleoturismo.

Esta difusión tiene lugar en enclaves como el de Finca La Oliveta, sita en Malagón, provincia de Ciudad Real, que practica la filosofía de transmitir el amor y los conocimientos adquiridos alrededor de este noble producto elaborado con el fruto del olivar. En su almazara se desarrollan los conceptos de innovación en elaboración de aceite de oliva virgen extra en conjunto con Mar Luna Villacañas, directora de la Escuela Europea de Cata de Aceite y Oleocultura.

A través del oleoturismo, es posible divulgar conocimientos y poner en valor el olivar y el 'oro líquido' de Castilla La Mancha, a la vez que se ofrece diversión, cultura, gastronomía y experiencias sensoriales para toda la familia. Esta actividad también permite aprender desde la tierra el valor de los olivos, sus cuidados y el esfuerzo orientado al resultado de un óptimo virgen extra, muy alejado de la casualidad. La ecorresponsabilidad juega un papel fundamental en este concepto de turismo, vinculado a la ecología de la verdad y sin etiquetas.

En La Oliveta se elaboran aceites de oliva virgen extra de la variedad de aceituna cornicabra, recolectadas en noviembre y procesadas totalmente en frío. Trabajando desde el campo hasta la almazara y cuidando todo el protocolo de calidad, se han conseguido elaborar dos vírgenes extra que no han pasado inadvertidos para los laboratorios barceloneses que los han analizado.

La diferencia entre ambos es el momento de recolección: 'Juventud' destaca por su sabor rotundo y potencia aromática, y 'Azulete', más amable y dulce, ya que fue recolectado 15 días después, representa el todoterreno para la cocina diaria. Ambos forman un conjunto perfecto para un amplio uso gastronómico tanto en frío como en caliente.

La mejor manera de apreciar un zumo es en crudo, pero si resulta necesario elevar la temperatura para hacer un sofrito, una buena fritura, un horneado o barbacoa, mejor hacerlo con un producto robusto, que aguante bien la temperatura y que aporte matices delicados de aromas a tu plato, como es el caso de estos aceites de alta calidad.

Sus beneficios nutricionales se demuestran en su analítica química y panel de cata, avalados por uno de los más prestigiosos laboratorios reconocidos por el Consejo Oleícola Internacional, máxima autoridad mundial.

Además, en La Oliveta se presta el servicio de maquila a particulares: el cliente trae sus propias aceitunas y se lleva el zumo resultante.