
La pareja formada por Kim Kardashian y Kayne West ya nos tiene acostumbrados a las excentricidades. La última fue la que preparó Kim para celebrar el cumpleaños de Kanye. El rapero, que cumplía 38 años, pudo disfrutar de todo un estadio entero para él.
110.000 dólares fueron los que Kim se gastó para alquilar el Staples Center de Los Ángeles. La pasión del rapero por el baloncesto fue lo que llevó a su novia a invertir ese dinero.
El estadio es la sede de los Los Angeles Clippers y Los Angeles Lakers, Sin embargo esta vez, fueron Kanye y sus amigos, entre ellos los jugadores como Kobe Bryant, Magic Johnson y Shaquille O'Neal, los que pisaron la pista. Kanye West, como jugador estrella del equipo, disfrutó de un auténtico grupo de animadoras y pudo escuchar el himno de Estados Unidos en la voz de John Legend, el último ganador del Oscar a la mejor canción. Aunque el momento más emotivo fue cuando Lengen cantó a Kanye West el Happy Birhday.
La noche fue larga y divertida, según se extrae de las fotos que la pareja estuvo colgando durante toda la noche en sus twitter. El resumen de una excentricidad más pero a la que nos tienen acostumbrados. En octubre de 2013 fue Kanye West quien alquiló el AT&T de San Francisco para proponerle matrimonio a Kardashian.