La lujosa vida que lleva Donald Trump no es un secreto para nadie. El multimillonario tiene en su poder un Boeing 757 y una serie de helicópteros personales que forman parte de su inmenso patrimonio. Pero, al parecer, el empresario estadounidense, cansado de viajar siempre en los mismos helicópteros, ha decidido reformar el interior de uno de ellos, el Sikorky S-76, y convertirlo en el más alto de la línea fabricado para la aviación privada.
Para esta obra de interiorismo Trump ha contratado a Eric Roth, el famoso diseñador de interiores de aviones, para que literalmente tirara a la basura todo el interior del helicóptero y lo redecorara de nuevo. El resultado ha sido un helicóptero con un interior chapado en oro de 24 quilates.
Al señor Trump le gusta viajar con estilo y por eso Roth ha diseñado desde los cinturones de seguridad hasta los tiradores y pasando por el sello de su nombre y casi todos los adornos de este helicóptero en oro de 24 quilates.
Tras esta reforma, el precio del helicóptero se ha disparado considerablemente. Si el moelo ​​Sikorsky básico se vende sobre los seis o siete millones de dólares, tras la caprichosa y lujosa reforma de Donald Trump, se estima que su precio podría haberse elevado en al menos 750.000 dólares.
Su diseñador Eric Roth se ha justificado asegurando que "si se tiene el nombre de Trump en él, tiene que ser el mejor de los mejores, y este helicóptero es digno de su nombre."
