Pasaron los tiempos en los que los adolescentes querían emular a su cantante favorito, a una actriz o a un personaje de ficción de alguna serie. Lo que se lleva en el siglo XXI, potenciado por el escaparate de imágenes que postulan las redes sociales, es emular hasta extremos insólitos a muñecos de goma.
Barbie y Ken, pese a estar hechos unos cincuentones (la muñeca americana fue comercializada en 1959), siguen pisando fuerte como referentes de imagen de los adolescentes actuales. Al menos, ejercen de auténticos modelos para algunos de ellos, que no dudan en llevar hasta las últimas consecuencias una caracterización artificial que les acerca al mundo de muñecos de goma y echa tierra de por medio entre los humanos de carne y hueso.
El último caso en hacerse un hueco en el universo internauta lo ha protagonizado Lolita Richi, una ucrania de 16 años que asegura haber conseguido su cara de Barbie sin recurrir a cirugías ni dietas, y que además se jacta de ser la más auténtica de entre las 'chicas Barbie' conocidas en los últimos años. Richi afirma que aprendió muy pronto el correcto manejo del maquillaje, con el que consigue -además de con las características físicas naturales de su cuerpo- el 'look' de la famosa muñeca. Algo, por cierto, de lo que su madre dice sentirse muy orgullosa. La adolescenta nacida en Kiev se muestra, además, muy perfeccionista, y considera que fue precisamente la búsqueda de la perfección lo que la llevó a construir su sorprendente imagen.
Decíamos que Lolita Richi se trataba del caso más reciente, pero ha habido otras y otros antes que ella en el camino de la conquista del universo plastificado.
En los dos últimos años, las redes sociales saludaban entre la burla y la admiración a Dakota Rose, una adolescente nacida en Florida (EEUU) que también se aficionó a los trucos de maquillaje para poder presentarse al mundo como una mezcla de muñeca de goma y personaje de anime (animación manga japonesa). Resulta también curioso cómo esta tendencia arrasa especialmente en Ucrania, donde, además del caso de Lolita Richi, ha habido otras 'Barbies humanas' como Valeria Lukyanova o Anastasya Shpagina, también menores de edad.
Y como no hay Barbie sin Ken, al final también hay chicos que han seguido la estela de emular al galán de plástico del siglo XX y mostrar su nueva imagen al mundo con cierto orgullo. Celso Santebañes es un joven brasileño de 20 años que ha invertido en tratamientos y quirófano hasta 35.000 euros para convertirse en Ken.
Antes que él, Justin Jedlica, un neoyorkino de 30 años, saltó a las redes sociales por su físico pluscuamperfecto e irreal de muñeco Ken, para el que invirtió 100.000 euros en cirugía a lo largo y ancho de su cuerpo. Jedlica, al igual que otros de estos jóvenes, sufre de obsesión por la belleza, y también ha optado por conseguir ese ideal a través del mundo irreal de lo que, básicamente, son juguetes con brazos y piernas.
El misterio de Dakota Rose
