
La top model está inmersa en un proceso de renovación de imagen con el que quiere dar el portazo definitivo a aquellos años marcados por las juergas con su ex novio Pete Doherty, en donde el alcohol y las drogas campaban a sus anchas por las vidas de ambos.
Es por ello que Kate Moss está empeñada en transmitir una imagen idílica de su vida y no ha dudado en optar por unas vacaciones de lo más familiares con su marido Jamie Hince, su hija Lila y su ex Jefferson Hack.
Y es que la modelo y Jefferson Hack mantienen una relación envidiable por el bien de su hija Lila, algo que han vuelto a demostrar compartiendo este viaje de descanso y placer en las bellas costas francesas de Saint Tropez.
Según comentaron unos amigos de la modelo a la prensa inglesa, la razón de este viaje se debería a que Kate querría volver a quedarse embarazada y por eso estaría optando por planes mucho más sosegados y alejados de las fiestas alocadas de su pasado.
Sin duda, una decisión muy acertada que está haciendo que recuperemos a la Kate más bella y sensual de todos los tiempos.