
Elegir un buen fotógrafo que inmortalice su boda es una de las mejores inversiones que puede valorar a la hora de preparar el presupuesto del evento. No hay nada peor que un recuerdo fotográfico hortera que guardar bajo llave en el altillo de alguna habitación. Comparar varios artistas, precios y porfolios es un buen consejo para conseguir al mejor fotógrafo que se adapte a los protagonistas del enlace. En este sentido, los fotógrafos estadounidenses Abbi y Callen Hearne tienen claro que su propuesta va dirigida a los novios más aventureros y viajeros.
Marido y mujer, Abbi y Callen viven en la carretera a tiempo completo por el oeste de los Estados Unidos persiguiendo hermosos lugares y grandes aventuras para poder retratar las mejores instantáneas del país con unos enamorados como protagonistas. Preparar una sesión de fotos con este matrimonio significa "hacer caminatas, ensuciarse un poco y desafiar el clima", explica en su página web. Lo cierto, algunas de sus sesiones favoritas han sido en días nublados o justo después de una tormenta masiva.
Abbi y Callen pasa mucho tiempo explorando para conseguir los escenarios perfectos. Su objetivo es encontrar ubicaciones únicas lejos de las multitudes y los lugares populares. "Ya sea que estemos mostrando rincones secretos del Valle de Yosemite o caminando unas cuantas millas en la tierra de BLM de Moab, prometemos llevarlo a una aventura real y ofrecerle impresionantes fotos en lugares hermosos", explican.
No obstante, asegura que nunca forzarán a ningún cliente a ir a algún lado que le pueda hacer sentir incómodo: "Creemos que su experiencia fotográfica debe ser divertida, romántica y aventurera". De hecho, Abbi y Callen siempre intentan conocer las personalidades de sus clientes para escoger las mejores localizaciones y colaboran para adaptarse a los plazos de la boda. Además, esta pareja se muestra encantada de viajar a cualquier parte del mundo que sea del gusto de los novios.
Una de las bodas más espectaculares hasta la fecha realizadas por este estudio fotográfico fue la de Kim y Ryan que se casaron en una red suspendida a 120 metros sobre el cañón de Moab, en Utah. La pareja de novios decidieron casarse en esta espectacular localización porque se habían conocido en el festival de alta costura GGBY de Moab. Para realizar esta boda y estas fotografías, los novios necesitaron la ayuda de Andy Lewis, el inventor que construyó la red de sujeción para celebrar una boda en esas condiciones.
La próxima parada de los Hearne es este próximo mes de febrero en el espacio natural The Redwoods en Yosemite, cerca de Wawona, California. Este estudio fotográfico ya tiene pactado varias sesiones fotográficas, de dos días cada una, en este entorno idílico. El precio, que varía entre los 850 y 2000 dólares, incluye el alojamiento de una noche en las inmediaciones del paraje y las comidas.
La cascada de fuego de Yosemite: solo en febrero e inolvidable
Si quiere ver uno de los mayores espectáculos naturales de EEUU debe darse prisa e ir preparándolo, pues solo pasa durante diez días del mes de Febrero. Se trata del fenómeno bautizado como Firefall en la cascada de Horsetail, en el Parque Nacional de Yosemite (California). En torno a la segunda quincena del mes de febrero, Yosemite se convierte en zona de acampada obliga de turistas y fotógrafos amantes de la naturaleza. La caída del sol invernal sobre la cascada de Horsetail provoca que ésta cambie su color por el rojo anaranjado. Y de ahí su nombre: Firefall, la cascada de fuego.