
Las nuevas tecnologías y formatos digitales están permitiendo que el acceso a contenidos audiovisuales sea mucho más sencillo. Series, películas de cine o música están disponibles a golpe de click y desde el sofá de casa. Por desgracia, en la industria cinematográfica esta realidad provoca que las salas de cine se estén quedando vacías.
Aquí en España, el elevado precio de las entradas suele ser la razón principal que explica la ausencia de público masivo en los cines. Quizá por ello, en los días del espectador y en las conocidas como 'fiestas del cine', los exhibidores ven como sus salas vuelven a llenarse.
Sin embargo, en Estados Unidos -el país de la meca del cine, Hollywood- no parecen estar apostando por estas técnicas de bajada de los precios. Su estrategia para aumentar el número de clientes en las salas de exhibición opta por mejorar el servicio y ofrecer una determinada experiencia que envuelva el visionado de la película.
Unas de las últimas compañías estadounidenses en secundar de esta estrategia son las denominadas iPic Theaters, cuya misión es que cada uno de sus clientes disfrute de una noche a su medida. Así, además de ver la película, los usuarios tienen la opción de tomar un buen cóctel o disfrutar de una deliciosa cena. Es decir, las salas de exhibición de estos cines se convierten en pequeños centros de ocio donde el cliente convierte la noche de cine en una experiencia.
Asimismo, las propias salas de iPic Theaters abogan por el máximo confort y comodidad. Las butacas tienen suficiente espacio, son reclinables, están recubiertas en piel y el usuario puede estar degustando una deliciosa cena desde su sitio sin tener que levantarse. Eso sí, el precio por la entrada puede ascender a los 30 euros.
Otra de las estrategias de estos cines es crear una buena comunidad entre los más aficionados al séptimo arte. A través de eventos, fiestas o un sistema de membresía, los iPic Theaters trabajan por convertirse en pequeños puntos de ocio donde la comunidad se divierta y disfrute de la película.