Frederik The Great (en castellano, Federico el grande) es el nombre que recibe el que es conocido como uno de los equinos más bellos del mundo. Con una página de Facebook que cuenta con más de 13.000 seguidores, el corcel suma aficionados por todo el planeta.

Este bello caballo es propiedad de la compañía estadounidense Pinnacle friessan, criadero de caballos especializado en caballos frisones, raza equina de la región de Frisia, en los Países Bajos. Frederik obtuvo en la Expo Woodside de California de 2007 el reconocimiento Doma Gran Campeón.

La grandeza y belleza de la raza frisón se debe principalmente a la historia y carácter indiscutible de los habitantes de Frisia. De hecho, a pesar de que la existencia de este tipo de caballo data de tiempos del Imperio Romano, esta raza ha sabido mantener su pureza y es considerada la única de origen holandés, autóctona y que sobrevive.

Localizados en el bello paraje de la meseta de Ozark, en los Estados Unidos; los criaderos Pinnacle friessan liderados por Stacy Nazario llevan décadas dedicados a la cría de sementales de esta raza, casi tres veces extinta. Además, estos criaderos se hacen eco de las preocupaciones sobre la alta endogamia de los cruces y ofrece un "bajo porcentaje de parentesco, seleccionando sólo los sangre pura holandesa", asegura Pinnacle friessan en su web.

Crítica, público y jueces han reconocido a Frederik su poder, elegancia, belleza y nobleza. Considerado uno de los más frisones fotografiados del planeta, este bello corcel se caracteriza por la altura y el potencial de rendimiento. En el trote, resalta las transiciones suaves y una gran voluntad de trabajar. Pinnacle friessan señala también su color negro y la cantidad de pelo.

Respecto al pedigrí de Frederick, su padre es un semental muy atlético, subcampeón del semental del año 2000, y su abuelo fue valorado como uno de los mejores sementales por el KFPS, asociación dedicada a la defensa y estudio de la raza frisón. Desde agosto de 2015, Frederick ya tiene descendencia: Vaughn, bello potro frisón que comparte el mismo aspecto imponente de su padre.