
Cuando se piensa en cosas caras, la primera imagen que viene a la cabeza puede que sea la originalidad, lo real o lo auténtico. Cuando se piensa en animales o mascotas caras, lo que viene a la cabeza es pureza, raza o un buen pedigrí ancestral. Sin embargo, si se habla del gato más caro del mundo acertarán aquellos que piensen en laboratorio, hibridación, mano del hombre y esterilidad.
La compañía Norteamericana Lifestyle Pets ha sido la creadora del gato más caro del mundo, el denominado gato Ashera. Debido a cuidadas técnicas de cruce y a la manipulación biotecnológica, esta compañía ha confeccionado, cual prenda de ropa, un gato que puede costar entre los 17.000 a los 96.000 euros. Es decir, muy caro.
Sin embargo, la indignación ante el precio puede que quede en nada si uno se indigna al saber que la diferencia de precio está en función de las cualidades que el gato tenga. Como si de un móvil se tratara, si se quiere que el gato tenga pelo blanco, sea hipoalergénico o tenga un aspecto más distinguido; el valor del gato será más o menos caro.
El gato Ashera le debe su precio a dos razones principales. La primera de ellas hace referencia al origen de la creación. Tres exclusivas especies de felino son las que han contribuido a confeccionar este gato. El cruce entre un gato doméstico con un Leopardo asiático y un Serval africano es el principio de la creación del gato Ashera.
La segunda de las razones que explican el elevado precio del gato está motivado por la decisión de la compañía de fabricar pocos ejemplares al año - se habla de unos 100- y porque todos sus ejemplares vendidos son estériles para evitar que sean otros los que comiencen la cría del Ashera, perdiendo así la exclusividad del laboratorio.
En este momento de la lectura los juicios de moral ya están establecidos y para muchos la belleza del gato no sea suficiente para comprender que existan empresas que hayan jugado a ser Dios. Cada uno con sus reflexiones. Pero, los que tienen el gato, los que desean tenerlo o simplemente aquellos enamorados de los gatos confiesan con orgullo - o con vergüenza - que el gato en muy bonito.
Es el aspecto salvaje y atigrado de la raza Ashera una de las principales razones que motivan la belleza del gato. De hecho, es un gato grande ya que puede alcanzar hasta 1.2 metros de altura y los 15 kilos de peso.
Ese gran tamaño obliga a sacar el gato a pasear. Fuera de esta pequeña salvedad, el resto de cuidados y el carácter de animal son los mismos que el resto de gatos 'normales'; salvo que necesitará mucha más comida.