El ayuntamiento de Madrid limitará a 89 días al año el uso turístico de viviendas residenciales
- Para 90 días o más se necesitará licencia específica de 'piso turístico'
- Se desconoce el precio de las licencias y el importe de las posibles multas
elEconomista.es
El Ayuntamiento de Madrid planea limitar a menos de 90 días al año el tiempo que se puede destinar a uso turístico de las viviendas residenciales. En el caso de los pisos que se empleen para esta actividad durante 90 días o más, deberán catalogarse como 'turísticos' y contar con las correspondientes licencias e impuestos.
Así lo anunció este miércoles la alcaldesa, Manuela Carmena, durante un desayuno informativo en el que avanzó un proyecto de plan de turismo sostenible con el que Madrid seguirá el camino emprendido por otras ciudades, como París o Barcelona, de limitar el número de días que los pisos residenciales pueden figurar al año en plataformas como Airbnb.
"Las viviendas particulares que se destinen a uso turístico por un tiempo inferior a 90 días tendrán catalogación de uso residencial", explicó, en tanto que las que quieran cederse a turistas durante tres meses o más, que el Ayuntamiento calcula en unas 1.000, tendrán que supeditarse a la autorización o no que se les conceda "según la conveniencia o no de seguir introduciendo establecimientos hoteleros" en la zona.
Se desconoce el importe de las multas
Según dijo, el proyecto tendrá que ir primero a la comisión municipal de interpretación de las normas y de seguimiento de la ordenación urbana, y todavía no se ha estudiado qué multas podrían aplicarse a los propietarios de pisos residenciales que superen los 90 días.
De momento, el Gobierno municipal pretende "concitar consensos" sobre esta "nueva interpretación de las normas" y sólo después establecerá las "estructuras sancionadoras". Carmena tampoco dio pistas de cuál será el precio de las licencias que tendrán que solicitar los propietarios de los pisos que pretendan alquilarse a turistas 90 días o más al año.
Según palabras de la alcaldesa de Madrid, no necesitan autorización por parte de la Comunidad para aplicar estas medidas porque lo que hace el Ayuntamiento es "una interpretación de la norma y esa es una competencia específica del Ayuntamiento". Además, el Ayuntamiento realizará un censo de viviendas turísticas y un plan especial que determinará dónde puede haber más establecimientos hoteleros en función de mediciones relativas a las calles, la movilidad o los ya existentes.
La alcaldesa ha recordado que la regulación última de la actividad turística es competencia de la Comunidad, vía decreto, pero ha apuntado que esa regulación "hay que concretarla" en la ciudad. Se hará con estas medidas, que siguen la línea de otras ciudades europeas de compatibilizar la vivienda personal y la profesional. "No queremos que esto sea una declaración sino un plan de acción", ha remachado.