Así es el rancho más grande de EEUU: está a la venta por 725 millones de dólares

El mayor rancho de EEUU está a la venta y como no podía ser de otra forma se encuentra en el estado de Texas. Su precio es de 725 millones de dólares, aunque su tamaño es espectacular parte de su valor también está en los 1.000 pozos petrolíferos que alberga o en las 6.800 cabezas de ganado que tiene. Si compras el rancho, todo lo que haya en su interior será tuyo.

Bernard Uechtritz, el agente inmobiliario que se encarga de su venta asegura que "se necesitan varios días para ver el rancho entero", algo que no parece extraño en una propiedad que tiene más de 2.000 kilómetros cuadrados de tamaño, un tamaño que supera en cuatro veces el de Andorra. Durante kilómetros y kilómetros "lo único que se puede ver en el horizonte es el rancho".

Una mina para la agricultura

Conocido con el nombre de Waggoner, este rancho contiene en su interior 121 kilómetros cuadrados de tierras cultivables, 29 tractores, además este rancho es mundialmente conocido por los caballos que se crían entre sus tierras.

El Waggoner lleva siendo de la misma familia casi desde que Texas se fundó como un estado. El año pasado, un juez de Vernon, una ciudad de unos 11.000 habitantes y que está a unas 11 millas del rancho ordenó la venta de la propiedad. Esta sentencia del juez Dan Mike pone fin a un litigio de más de 20 años que enfrentaba a varios miembros de la familia Waggoner que no lograban ponerse de acuerdo para dividir la propiedad o para poner a la venta.

Bernard Uechtritz asegura que hay interés por el rancho, hace escasos días recibió la llamada un señor que representaba a una petrolera europea. Este portavoz le explicó al agente inmobiliario que ya había llamado hace tiempo para realizar una oferta, "pero como contestación recibimos una mierda", Uechtritz le explicó que en esta ocasión eso ya no iba a suceder.

Aunque existe un gran interés por vender el rancho, Uechtritz reconoce que existe cierto temor. El nuevo comprado podría dividir la propiedad en varias parcelas para venderlas con mayor facilidad y a la vez sacar unos beneficios. Para ello, lo más seguro es que este nuevo dueño se viera obligado a despedir a los 120 empleados y contribuir a la desaparición de la marca Waggoner.