Vivienda
Las ciudades más caras y las más baratas para compartir piso
- Una habitación en una vivienda de alquiler cuesta una media de 268 euros al mes
Lorena Torío
Vivir solo de alquiler en España es un lujo, y hasta casi un imposible. No es para menos. El coste teórico de alquilar una casa en solitario supone tener que destinar el 91,6% del suelo a pagar el alquiler, según el Observatorio del Consejo de Juventud España. Esa situación lleva a muchas personas a compartir piso, una opción que requiere desembolsar el 27,8% de los ingresos. Pero, ¿cuánto cuesta de media alquilar una habitación y cuáles son las ciudades más caras y más baratas?
El precio medio de una habitación en un piso compartido es de 268 euros al mes, pero la cifra se puede elevar por encima de los 400 euros en algunas capitales, según el portal inmobiliario pisos.com. Ocurre en Barcelona, que se corona como la ciudad más cara del país para compartir casa (442,4 euros/mes), seguida de San Sebastián (426,02 euro/mes), Madrid (414,36 euros /mes) y Pamplona (411,05 euros/mes). Palma de Mallorca también está en la lista de ciudades más caras, aunque no supera los 400 euros de renta al mes. En concreto, los inquilinos pagan allí una media de 387,71 euros.
Por el contrario, en un puñado de ciudades es posible vivir en un piso compartido por menos de 200 euros. La capital más económica es Ciudad Real (160,36 euros/mes), seguida de Lugo (171,67 euros/mes), Badajoz (180,10 euros/mes), Palencia (182,27 euros /mes) y Jaén (197,51 euros/mes). En un punto intermedio se encuentran ciudades como Toledo, Alicante, Almería, Logroño o Lleida, donde las habitaciones en pisos compartidos oscilan entre 270 y 250 euros mensuales, tal y como recoge el Informe anual de pisos compartidos en España 2021.
Precios estables
La renta media anual del alquiler en pisos compartido apenas ha bajado un 0,68% anual este año en curso, y la previsión es que se mantenga sin cambios en los próximos meses. "El mercado de pisos compartidos se ha visto afectado por el coronavirus, trastocando los planes de muchos inquilinos que a día de hoy deberían estar buscando habitación para estudiar o para emanciparse de sus padres, que es la única alternativa para muchos jóvenes. En cuanto a la previsión de precios, esperamos que igual que el mercado de venta o de alquiler, la moderación será la tónica dominante de aquí a finales de año. Las plazas más caras para compartir piso serán aquellas relacionadas con centros estudiantiles", explica Ferrán Font, director de estudios de pisos.com.
En cuanto a la localización, la mayoría de la oferta de pisos compartidos se reparte entre las provincias de Barcelona (24,69%), Madrid (20,94%) y Valencia (6,34%). Les siguen por orden Sevilla, Málaga, Alicante, Granada y Baleares, aunque en ningún caso superan el 5%. ¿Y dónde se concentra la mayor parte de la demanda? Los primeros puestos los ocupan Madrid (21,95%), Barcelona (21,83%), Sevilla (7,10%), Valencia (5,14%), Málaga (4,62%). Entre todas aglutinan seis de cada diez búsquedas de alojamientos compartidos.
Mujer de entre 18 y 25 años
El perfil por sexo y por edad de los futuros inquilinos está muy definido. En cuestión de género, las mujeres representan un 54,89% de la demanda y los hombres un 45,11%. Si se tiene en cuenta el reparto de provincias en función del sexo, Granada es la provincia con más presencia femenina (60,26%) y menos masculina (39,74%), mientras que Las Palmas arroja la menor cantidad de demanda femenina (49,91%) y la mayor de masculina (50,09%). En cuanto a los años, los usuarios más jóvenes constituyen el grueso de la demanda que busca habitación en piso compartido. En concreto, el rango de edad comprendido entre los 18 y 25 años supone el 51,10% del total. Por detrás se colocan las personas de entre 26 a 35 años (29,29%), seguido de inquilinos de entre 36 y 45 años (10,95%), y las personas de entre 46 y 60 años. Los mayores de 60 años cierran el listado con un 2,08% de representación.
El acceso de los jóvenes a la vivienda es uno de los grandes problemas que arrastra el país desde hace años. Los altos precios de los inmuebles contrastan con los modestos salarios y el nivel de desempleo de los menores de 30 años. Además, su situación ha empeorado con la pandemia del coronavirus y ha provocado que solo el 17% de los jóvenes se haya emancipado de su hogar a finales de 2020, según los últimos datos del Consejo de la Juventud de España.
Habitaciones amuebladas
En cuanto a las características de las habitaciones que se alquilan en pisos compartidos, la mayoría (94,69%) están amuebladas y tienen calefacción (56,23%). También cuentan con lavadora, televisión, teléfono e Internet. El extra con mayor presencia es el ascensor (61,54%), mientras que el electrodoméstico menos habitual es la secadora (11,29%), y el servicio comunitario más escaso es el gimnasio (0,26%). Tampoco es frecuente encontrar habitaciones con balcón, TV y teléfono propio, y escasean las estancias individuales con aire acondicionado.
A la hora de buscar compañeros de piso, el 76,78% de los anuncios no especifica preferencia de género. Los pisos que solo aceptan chicas han pasado del 13,84% de 2020 al 20,09% de 2021, y los que solo aceptan chicos han aumentado desde el 2,11% del año anterior al 3,24% del ejercicio presente. En cuanto a las parejas, suben del 6,61% al 10,72%. Las mascotas son bienvenidas en el 10,45% de los pisos, mientras que los fumadores tienen vetada la entrada en el 41,36%.