Vivienda - Inmobiliario

Cataluña solo destina el 25% de los impuestos recaudados por vivienda a la crisis habitacional

  • Los expertos piden mayor disciplina en el gasto de los recursos generados por figuras como el ITP
Presentación del estudio de APCE, Tecnocasa y la UPF. CEDIDA

Aleix Mercader
Barcelona,

Cataluña apenas exprime la recaudación por los impuestos relacionados con la vivienda para paliar su crisis habitacional. Según un estudio elaborado por la Asociación de Promotores y Constructores de Cataluña (APCE), Tecnocasa y la Universidad Pompeu Fabra (UPF), solo el 25% de los recursos obtenidos con esta cesta impositiva se destina a políticas de vivienda en la comunidad. Este porcentaje, referido al ejercicio 2023, supera al de años anteriores ya que se nutre de los fondos extraordinarios activados por la Unión Europea a raíz de la pandemia del Covid. En 2019, la cantidad ni siquiera llegó al 16%.

El análisis toma en consideración 14 tributos de ámbito municipal, autonómico y estatal para estimar el dinero recaudado por el "hecho imponible vivienda", un concepto diseñado por los autores del informe para englobar todas las cargas fiscales relacionadas con la propiedad, la construcción, las transmisiones de vivienda nueva y usada y otros conceptos urbanísticos (como las cédulas de habitabilidad y licencias urbanísticas).

Este conjunto supone una fuente de ingresos relevante para las administraciones públicas (5.000 millones de euros en Cataluña), aunque contrasta con el gasto efectivo en vivienda, que apenas superó los 1.500 millones en 2023. En buena medida, esta afluencia de recursos se deriva a cubrir gasto corriente u otras inversiones de los presupuestos públicos.

Si se segmenta por niveles administrativos, se observa que los municipios catalanes ingresaron más de 2.300 millones de euros, la Generalitat, unos 2.100 millones, y el Estado, algo más de 213 millones. Sin embargo, el esfuerzo inversor fue desigual: mientras que los ayuntamientos fueron los que más aprovecharon este caudal económico (22,2%), la Generalitat apenas revirtió el 13,3% en políticas de vivienda. El impacto de los fondos Next Generation distorsiona el dato del Estado en 2023, que canalizó un extraordinario 168%.

Si bien la legislación impide que gravámenes estrictamente vinculados a la vivienda, como el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), adquieran un carácter finalista, los autores del monográfico aconsejan "mayor autocontrol" en el gasto para optimizar los recursos fiscales. Además, el estudio propone pasar del 25% al 75% de gasto basado en la recaudación por vivienda para homologar España con el resto de países europeos.

Sin abandonar el ITP, el presidente de APCE, Xavier Vilajoana, cuestionó que el aumento del 10% al 20% para grandes tenedores "vaya a solucionar el problema de la vivienda". "Duplicar el ITP solo sube el coste para los constructores", ha lamentado.