Vivienda - Inmobiliario

A tener en cuenta: estos son los primeros datos que comprueba un banco antes de darte una hipoteca y algunos son definitivos

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elEconomista.es

La subida de los precios del alquiler ante la escasez de oferta puede llevar a algunas personas a cambiar su estrategia y optar por la compra de una casa. La gran mayoría de futuros compradores de vivienda tienen ante sí una misión: conseguir una hipoteca en las mejores condiciones posibles, para lo cual estarán mejor preparados si cumplen varios requisitos.

La 'fintech' Gibobs ha publicado en su página web una lista de "los aspectos más importantes que debes conocer para aumentar tus probabilidades de que un banco te conceda una hipoteca". El objetivo, convencer a estas entidades para que financien la compra de la propiedad.

El porcentaje de financiación

Es uno de los factores a tener en cuenta: se calcula dividiendo el importe del préstamo que se solicita entre el importe total de la vivienda que se desea adquirir con ese dinero. Se expresa con las iniciales LTV, correspondientes a Loan To Value, en inglés, y se expresa en porcentaje.

Por norma general, los bancos no prestan más del 80% del importe de la vivienda, por lo que el comprador debe hacerse a la idea de que, al pedir una hipoteca, debe contar con ahorros de al menos un 20% del importe de esa casa que quiere comprar. De lo contrario, tendrá más complicado acceder a la hipoteca.

La capacidad de endeudamiento

Es el porcentaje de los ingresos mensuales que hay que destinar al pago de la hipoteca y el resto de deudas. En este caso se le define como DTI (Debt To Income). "Generalmente, los bancos prefieren que tu DTI no supere el 35-40%", explican en Gibobs.

Por ejemplo, una persona que cobra un sueldo mensual de 2.000 euros y desea solicitar una hipoteca de unos 500 euros a la que habría sumar otros gastos de deuda por importe de 300 euros tendría un total de deuda de 800 euros, el 40% de sus ingresos totales. Con eso estaría en el límite de los bancos.

Lo resumen en Gibobs: "Cuanto menor sea tu DTI, más fácil será para el banco concederte la hipoteca". Como telón de fondo, la intención por parte de los bancos de asumir el menor riesgo posible.

Un historial crediticio impoluto

Los bancos solo contratarán a personas que no tengan un historial de impagos, por lo que se centrarán en conceder hipotecas a los clientes que tengan un "historial de pagos responsable" y sin problemas financieros en el pasado.

Estabilidad

Como es natural, los bancos piden a los clientes estabilidad con la que poder hacer frente a los pagos de la hipoteca. De lo contrario, optarán por rechazarla. Esta estabilidad se refiere a varios campos, como el laboral y el económico. "Tener un trabajo estable, especialmente en una posición de largo plazo, es clave", aseveran en Gibobs.