La implantación de la IA aumenta la productividad en el sector inmobiliario

La irrupción de la inteligencia artificial (IA) en el sector inmobiliario ha supuesto un aumento de la productividad, de las ventas, de la mejora en la calidad del servicio, y una mayor eficiencia, transparencia y rapidez en el proceso de compraventa de inmuebles. Esta tecnología está siendo aplicada en diversas áreas para optimizar procesos, mejorar la experiencia del cliente y obtener insights más profundos sobre el mercado. Los expertos estiman que la IA tiene un crecimiento esperado del 25%.

En poco más de un año, la IA ha pasado de ser un área de nicho de I+D en tecnología a lo que ahora parece que se convertirá en una industria de 3 billones de dólares para 2029. "Esa cifra hasta se queda corta. Nosotros desde Merlín Properties no es que creamos que la IA, y en general las infraestructuras digitales, van a tener un recorrido durante los próximos años exponencial, sino que estamos apostando gran parte del futuro de la compañía en este sentido. Desde hace ya unos años nos embarcamos en un proceso de transformación de la empresa y de los activos inmobiliarios en los que participamos e invertimos y empezamos nuestro proyecto desde los data centers que originalmente iban muy enfocados al tema de la nube y todas esas otras aplicaciones, pero que desde el año pasado y con la explosión que estamos viendo de la IA, apostamos a que esta unidad de negocio como es las infraestructuras asociadas a la inteligencia artificial que hace 2 o 3 años no existía dentro de la compañía, llegue a representar un porcentaje muy significativo dentro de la misma", declara Álvaro Ontanon, Chief Tecnology Officer de Merlin Properties.

Jorge Valero, director de Aplicaciones y Data de Aedas Homes, lo tiene claro, "la IA es el presente y no es el futuro. Es una revolución como lo fue Internet o como lo fue Excel en los años 70 y 80". De la misma opinión es Javier Martínez, head of customer engineering Google Cloud Spain and Portugal. "Google apuesta 100% por la tecnología y en Google Cloud lo que hacemos es llevar esta tecnología al mundo de las empresas desarrollando asistentes digitales para, en el caso de las inmobiliarias, ayudar al cliente a utilizar la información en el proceso de compra. La IA es realmente una revolución".

Desde Gilmar también la tecnología es prioritaria. "Hay que adoptar la inteligencia artificial como algo natural que nos encontramos en el día a día, como si fuera nuestro mejor amigo que nos va a acompañar y resolver dudas que tengamos en cualquier proceso. Ya se aplica a todos los sectores y en el inmobiliario también cuando tienes alguna duda al comprar una vivienda. Para el mundo inmobiliario supone ahorro de tiempo al encontrar de manera más fácil la vivienda que quieres pudiéndole preguntar cómo le preguntarías a tu mejor amigo", apunta Jesús López Mayoral, CTO de Gilmar.

¿Cómo se aplica la IA en el inmobiliario?

"Los datos son los que mueven la inteligencia artificial, sin datos no habría inteligencia artificial y sin capacidad de cómputo no podríamos ser capaces de procesar la ingente cantidad de datos que tenemos a nuestra disposición. En Aedas estamos usando la tecnología, entre otras cosas, para poder reducir los tiempos de análisis de suelos. Cada vez que nos llega una oportunidad nosotros intentamos analizar con todo detalle qué tipo de producto podemos desarrollar dentro de ese suelo. Buscamos darle las herramientas a los arquitectos para que puedan hacer esos análisis previos de qué producto puede encajarse en ese suelo desde el punto de vista de la rentabilidad y qué producto es el óptimo para captar la demanda que hay en esa zona y de cara a construirlo", asegura Jorge Valero

Merlin Properties ve dos puntos de vista en la ampliación de la IA en el sector. "Por un lado, está la parte de productividad, que yo creo que es lo que realmente ha enganchado a la gente porque han visto que es muy fácil interactuar con la IA y que se consiguen resultados y lo hemos logrado con los famosos chat GPT. Las máquinas han aprendido a hablar nuestro idioma y podemos hablar con ellas de tú a tú y conseguir una información de una manera más fácil. Por otro lado, hemos conseguido indexar todo el conocimiento. En Merlin, desde el lado de la productividad lo estamos utilizando para la parte de ofimática y del día a día en las revisiones de contratos, de datos de información para ser más productivos y básicamente sacar más provecho en menos tiempo y en la parte más inmobiliaria, utilizamos la IA para la gestión operativa de los activos. Nosotros no promovemos ni vendemos los activos, los mantenemos y los operamos durante muchos años y para ello el análisis del dato viene bien con la finalidad de mejorar los servicios para el usuario", apunta Álvaro Ontanon.

Microsoft ha elegido a Gilmar como ejemplo en la utilización de la inteligencia artificial en el sector inmobiliario. "En Gilmar venimos utilizando la IA desde hace un tiempo, para la ayuda en la generación de las descripciones de los inmuebles. La última novedad es una herramienta de búsqueda de viviendas basada en imágenes. Hemos incluido la posibilidad de encontrar viviendas partiendo de una fotografía. Gracias a la IA, puedes utilizar una foto para encontrar dentro de la oferta de 3.000 productos de Gilmar, aquellas viviendas que más se parecen a lo que esa imagen transmite. Esta herramienta innovadora permite a los usuarios subir fotos de espacios que les gustan, y la IA de Gilmar analiza estas imágenes para identificar características como amplitud, luminosidad y estilo de decoración. Luego, el sistema busca en la base de datos de propiedades de Gilmar para encontrar aquellas que se ajusten a las preferencias del usuario, ofreciendo una experiencia de búsqueda personalizada y eficiente", explica Jesús López Mayoral.

Según Jorge Valero, está demostrado que "la IA generativa es un elemento que puede ser diferencial a la hora de trabajar en la productividad y desarrollar aplicaciones generando y ayudando a crear códigos para ser más eficientes y poder entregar un producto tecnológico en mucho menos tiempo. Hablamos de reducciones de un 40 o 50% a veces en el tiempo de entrega de un producto respecto a no usar IA generativa. Incluso hay alguna encuesta que ha empezado a trasladar que con el uso de copilotos cada persona no como empleado sino en su faceta personal, puede ahorrar 30 minutos diarios usando copilotos".

¿Por dónde va la tendencia del mercado?

"La primera aplicación y la más relevante es para el servicio a usuarios tanto internos, empleados como externos, consumidor o cliente. En Google una aplicación que estamos terminando de madurar a futuro se basa en cómo poder ayudar a que todo el mundo pueda encontrar una vivienda y hacer la búsqueda más accesible. Ya hemos visto que con las imágenes podemos encontrar esa vivienda y si le damos una vuelta más, podemos intentar crear una conversación alrededor de una imagen y esa conversación la puede mantener cualquier persona incluso aquellas que tienen dificultades visuales o incluso invidentes. Esto es un reto y sin duda es una ventaja que alguien que tiene disminuida su capacidad visual pueda ser autónomo y encontrar la vivienda que más le guste gracias a la IA, luego aún hay muchos retos que alcanzar con la IA", afirma Javier Martínez.

Hay un reto muy importante que se suma al resto de los retos que tiene la implantación de la IA y es el cambio cultural. "Decirle a la gente que hay una nueva forma de trabajar y tienen que adaptarte a trabajar con ella es todo un reto", asegura Jorge Valero. ¿Qué coste tiene implantar la inteligencia artificial? Tenemos claro que con la IA se produce más, pero ¿gastaremos más con inteligencia artificial o menos? Según los expertos, estamos en un momento especial porque estamos viendo como empieza esta revolución de la IA como pasó en los 90 cuando empezó internet o cuando empezaban las máquinas de vapor. Todos estamos de acuerdo que la implantación de la IA va a ser muy grande, muy potente, pero todavía la regulación está por venir y hay un montón de cosas que no sabemos y la propia tecnología va a una velocidad muy rápida.

"Cuantificar el coste es difícil, pero tengo claro que las empresas tienen que implantar esos agentes y probar y explorar, porque es verdad que si queremos ser innovadores y queremos ser los primeros que hagan algo hay que probarlo. Hay veces que lo pruebas y lo descartas y otras veces lo pruebas y termina siendo un éxito. Hay que buscar la rentabilidad a medio plazo, pero a corto plazo hay que ser flexibles y probar mucho porque la tecnología está cambiando todas las semanas", explica Javier Martínez.

En resumen, la inteligencia artificial está transformando el sector inmobiliario al hacer que los procesos sean más eficientes, las decisiones más inteligentes y la experiencia del cliente más personalizada. A medida que la tecnología continúa avanzando, podemos esperar ver aún más aplicaciones innovadoras de la inteligencia artificial en el sector inmobiliario.