La compraventa de viviendas se disparó un 11% de febrero a marzo olvidando la subida de tipos
- Se trata de su mayor alza en un mes de marzo de los últimos cinco años
- En tasa interanual cayeron un 5,7% y encadenan dos meses en negativo
- El sector estima que la compraventa podría moderarse un 15% en 2023
María Medinilla
Segundo mes consecutivo de caídas interanuales en la compraventa de viviendas. Con 55.778 operaciones, marzo anotó un descenso del 5,7% siguiendo con la tendencia a la baja firmada en tres de los cuatro últimos meses en un contexto de tipos de interés más elevados. Sin embargo, la lectura mensual -de febrero a marzo- marca una subida del 11% que no se registraba en este mes del año desde hacía cinco años.
El dato publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirma la senda de ralentización. Por segundo mes consecutivo la transmisión de derechos de la propiedad se sitúa en tasas negativas, aunque en marzo fueron más moderadas que en febrero, cuando disminuyó un 6,6% interanual.
¿Cómo interpretan esta evolución en el sector? Para María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, las cifras son aún buenas: "Las compraventas se resisten a moderarse al superar las 50.000 operaciones", aunque confirma los síntomas de ralentización que empezaron a dejarse notar a cierre de 2022.
El "año dorado de gran dinamismo para el inmobiliario" queda atrás y comienza una tendencia de acomodación del mercado a la nueva situación económica aunque "todavía existe un interés muy fuerte por comprar vivienda en nuestro país", recalca la experta. En marzo el euríbor se situó en torno al 3,647% pero las operaciones cerradas ese mes se iniciarían unos dos meses antes, cuando el índice rondaba el 3,3%: "puede que aún no tuviesen un efecto ralentizador", matiza Matos.
En el tercer mes de año cayeron tanto de las operaciones sobre pisos de segunda mano como las de viviendas nuevas. Estadística apunta a que la compraventa de vivienda usada bajó un 5,3%, hasta sumar 45.309 operaciones y encadena ya dos meses en negativo. Peor desarrollo dibuja la vivienda nueva, cuyas transacciones disminuyeron un 7,5% con 10.469 operaciones; ha registrado caídas en seis de los siete últimos meses.
Pese al contexto actual dominado por la inflación, la lectura es distinta en la gráfica intermensual. Entre febrero y marzo la compraventa de viviendas se disparó un 11%, su mayor alza en un mes de marzo de los últimos cinco años y un punto por encima de la del año pasado.
De enero a marzo, la compraventa de viviendas se redujo un 2,1%, tras retroceder las operaciones sobre viviendas nuevas un 3,9% y bajar las realizadas sobre viviendas usadas un 1,6%.
Desde el inmobiliario aún ven vigorosidad en el sector: "Los próximos meses vamos a ver todavía un sector dinámico, aunque con cifras menos abultadas respecto al año pasado", asegura Matos, quien, ante la incertidumbre de cuántas subidas de tipos quedan, estima que las compraventas "podrán moderarse en torno a un 15% en 2023".