Comunidad Valenciana

PP cree que logrará "mayoría suficiente", mientras PSPV confía en liderar un gobierno en coalición


    Olivia Fontanillo

    Partido Popular y PSPV cierran la campaña electoral con sensaciones positivas y confiados en sus opciones de formar el gobierno que dirija a la Comunidad Valenciana durante los próximos cuatro años.

    El Partido Popular cierra la campaña electoral más abierta de la historia de la Comunidad Valenciana con una sensación mucho más positiva que la que tenía cuando empezó. Las últimas encuestas han ido reflejando una paulatina recuperación en la intención de voto para la formación, que confía en lograr "una mayoría suficiente". Fuentes del PPCV estiman que podrían alcanzar el 35 por ciento de los votos, porcentaje que les daría entre 38 y 40 diputados en Les Corts valencianas. Este número está aún muy por debajo de los 55 escaños que tiene la formación actualmente, pero supone una mejora sustancial respecto a los 20-24 diputados que le concedían los primeros sondeos. Para lograrlo, apela a la movilización de los electores fieles al partido y al voto oculto.

    La formación confía en poder llegar a un acuerdo con Ciudadanos, con el que destaca las coincidencias en líneas estratégicas fundamentales, como la lucha contra la corrupción y las políticas económicas, fiscales y de generación de empleo.

    La estimación barajada por el PPCV apunta a que la formación liderada en la comunidad por Carolina Punset podría conseguir entre 14 y 15 escaños. Esto supone que, si PP y Ciudadanos se situasen en la línea superior de las previsiones, la posible alianza de centro-derecha formada por estos partidos lograría mantener los 55 escaños con los que ha gobernado el PP en la última legislatura.

    Si se cumpliese este reparto, los partidos de izquierda (PSPV-PSOE, Podemos, Compromìs per València y Esquerra Unida del País Valenciá) sumarían entre 44 y 47 diputados.

    El PSPV contempla un resultado menos positivo para el PP, con el que recortaría distancias respecto a 2011. En concreto, sitúa la intención de voto para los populares entre el 27 por ciento y el 30 por ciento, mientras que el que correspondería a su formación estaría entre el 23 por ciento y el 26 por ciento.

    En este contexto, las opciones de una potencial coalición de la oposición de izquierdas que asuma la presidencia de la Generalitat cobran peso.

    Un factor a tener en cuenta es que la asignación de diputados para los partidos mayoritarios podría verse aumentada si EU no logra hacerse con el 5 por ciento de votos mínimos exigidos para tener representación en Les Corts. El partido de Ignacio Blanco, a pesar de haber ejercicio una enérgica oposición durante toda la legislatura y de haber destapado algunos de los casos que han salpicado a altos cargos en los últimos años (como Imelsa o Valmor), está en la cuerda floja, tras la irrupción de Podemos, que le restó una gran parte de los apoyos.

    Respecto a Podemos, al contrario de lo sucedido con PP y Ciudadanos, la intención de voto se ha ido desinflando en las últimas semanas, lo que puede beneficiar al PSPV-PSOE, que recuperaría parte del terreno que parecía perdido a manos del partido de Pablo Iglesias.

    Desde el PPCV se descarta una situación como la que vive Andalucía, sin gobierno dos meses después de las elecciones por la falta de acuerdos. Considera que, en estas elecciones, los partidos tendrán que posicionarse y tomar decisiones.