Cleop entra en concurso de acreedores tras cuatro meses de negociación con los bancos
La Compañía Valenciana de Edificación y Obra Pública (Cleop) se ha declarado en concurso voluntario de acreedores al no haber alcanzado un acuerdo de refinanciación con los bancos, con los que ha negociado durante los cuatro meses que la ley le otorga una vez presentado el preconcurso. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha suspendido el valor de cotización.
La deuda de Cleop con los bancos al acabar 2011 era de 143,4 millones, la mitad a corto plazo, y la deuda total era de 207 millones, de los que 129 eran a corto plazo.
En la memoria anual de 2011 presentada el pasado 28 de mayo en la CNMV, se advertía la dificultad de evitar el concurso, ya que Cleop afirmaba que "ha elevado a público unilateralmente" un acuerdo marco de refinanciación al que "está pendiente" que se adhieran las entidades que forman el pool bancario.
La fecha límite para presentar un acuerdo en el juzgado o declararse en concurso voluntario de acreedores era el 13 de junio, cuatro meses después de acogerse al llamado preconcurso. Los principales acreedores son Banco de Valencia, que desde la intervención ha endurecido las condiciones para refinanciar, y Bankia.
El acuerdo presentado contemplaba para el pasivo no circulante tres años de carencia y la amortización posterior en siete años. Para el pago de los intereses durante los primeros tres años estaba previsto disponer de una línea de financiación adicional. Además, contempla la necesidad de cubrir el déficit de tesorería y la disposición de nuevas líneas de financiación de circulante -descuento y anticipo de certificaciones públicas-, así como de avales para licitar en concursos.
Reformula sus cuentas
En la citada memoria, Cleop reformuló la cuenta de resultados de 2011 que había presentado en febrero y ha multiplicado por siete las pérdidas consolidadas, de 1,21 a 8,41 millones de euros, según consta en la memoria auditada con salvedades.
Según comprobó elEconomista, los cambios más significativos entre ambas cuentas eran la minoración de facturación en casi 5 millones -hasta 65,29 millones- y los aumentos en 8 millones de los aprovisionamientos y en 2,6 millones de otros gastos de explotación.
Este cambio no evitó que Delolitte incluyera en el informe de auditoría dos salvedades y una "incertidumbre significativa" sobre la viabilidad de la constructora, precisamente por la inminencia del fin del plazo para evitar el concurso.