Vietnam con los cinco sentidos
Pedro Grifol, Laura Crawford
Algunos destinos tienen su mejor temporada en estos últimos meses del año… Y ahora es el momento dulce de Vietnam.
Los turistas procedentes de los países europeos ya nos beneficiamos de la exención del visado de entrada a este país asiático. Además, a diferencia de otros países que en la actualidad atraviesan una etapa conflictiva, Vietnam goza de una paz exultante. Las lluvias han pasado y el calor disminuye considerablemente. Así que estas navidades puedes ir pensando en conocer uno de lugares más fascinantes del universo turístico.
La puerta de entrada al país es Hanoi, su capital. Una metrópoli con siete millones de habitantes ¡y cinco millones de motos! Ciudad hormiguero que se nutre de vida en cada esquina. Todo sorprende por primera vez, no cabe la indiferencia. Los semáforos son una sugerencia ¡y, a veces, puede que una provocación! Consejo a tener en cuenta: cruzar la calle con estoica parsimonia para dar tiempo a que los motoristas esquiven al peatón. Parece peligroso pero en la práctica funciona.
Hanoi representa el alma cultural del país y conserva pinceladas del encanto de la era colonial. Recomendable, antes de viajar, ver la película "Indochina" porque nos instruirá sobre la historia del país.
Empezaremos nuestro paseo explorador por el laberinto de callejuelas del casco viejo como preámbulo de la visita al Puente Rojo del Sol Naciente, que está en el lago de la Espada Restituida… todo muy poético (y escenario ideal para el selfie de pareja). Con el plano en la mano y sorteando el caótico tráfico, paseo a pie hasta el Templo de la Literatura, maravilloso recinto que condensa arte y armonía. Después al hotel, ducha, cena exótica… y a preparar otra intensa jornada para el día siguiente.
Escapada a Sapa, Halong y Ho Chi Minh
El extremo más septentrional del país, fácilmente accesible por carretera, y también por tren desde Hanoi, está salpicado por diversos grupos étnicos que habitan aldeas remotas situadas sobre montañas y rodeadas de pendientes con terrazas de arroz, donde la niebla se apodera de colinas y valles dejándonos vislumbrar los rayos de sol a su antojo. El paisaje de Sapa -que es como se llama la región- es un tónico estimulante para la vista.
El lugar ofrece la posibilidad para practicar senderismo y conocer las costumbres de los lugareños que conservan con orgullo sus tradiciones. Los hmong, red dzao, muong y hao son sus habitantes, que marcan la diferencia entre ellos mediante sus llamativas vestimentas tradicionales. Si en Hanoi hemos visitado algunos mercados, en Sapa nos llevaremos las impresiones más fuertes. Para no perderse el mercado de los sábados de Pha Long, aldea colindante en la frontera con China, donde la autenticidad de las escenas vividas -y los productos a la venta- no nos dejará impasibles: carne de perro expuesta en los mostradores y botellas de aguardiente con serpientes dentro.
¿Te imaginas ver el primer amanecer de 2018 desde la cubierta de un junco…cuando la niebla va desvelando los pináculos calizos forrados de vegetación que emergen como puños del mar moldeando un escenario fantasmal? Pues ese es el escenario de la Bahia de Halong, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y una de las siete maravillas naturales del mundo.
La bahía es un laberinto marino formado por miles de islotes situado en el golfo de Tonkín, excursión -¡ineludible!- que se puede contratar desde Hanoi. Lo recomendable es realizar un crucero de un día (con su noche correspondiente) para que tengamos la opción de entregarnos a su intenso atardecer y a disfrutar del placer de la vida contemplativa.
Hué, situada en el centro del país, es su ciudad más monumental. Haber sido la capital del imperio durante siglo y medio, hizo que se levantara una ciudadela magnífica a imagen y semejanza de la ciudad prohibida de Pekín. El penúltimo miembro de la dinastía Nguyen, Khai Dinh, conocido como "el afrancesado" por su cercanía con los colonialistas galos, incorporó múltiples influencias occidentales en la arquitectura clásica vietnamita que merecen la pena incorporar a nuestro acervo cultural-visual. Un par de días de estancia serán suficientes.
Al sur de país se encuentra su ciudad más grande, Ho Chi Minh City. Activa, con las pilas siempre cargadas, que también nos recibe con un tráfico protagonizado por todo tipo de vehículos de dos ruedas conducidos por acróbatas que cargan sus máquinas hasta límites surreales: gallinas, patos, cerdos, bloques de hielo… todo lo imaginable -e insólito- que cabe en una moto.
Obligatorio dar un paseo por Cholon, un barrio que cuenta con gran cantidad de templos muy peculiares, en los que se puede entrar, ver y fotografiar a tu albedrío todos los juegos rituales que realizan los fieles. Para no perderse tampoco la pagoda de Phuoc An Hoi Quan, una de las estructuras más bellas de la ciudad, donde se encuentra la figura del caballo sagrado Quan Cong y donde cuenta la tradición que, antes de emprender un viaje, los viajeros frotan sus crines con las manos y hacen sonar la campana que lleva al cuello como mensaje de buena suerte. Idolatría cien por cien ¡fantástico!
Y el Museo de la Guerra, testigo de la Historia, al que yo prefiero llamar 'el museo del horror' (recordando la última frase de la película Apocalypse Now, cuando después del fundido final en negro, una voz en off balbucea: "el horror... el horror"). Además de los artefactos bélicos y las famosas fotos sobre la Guerra de Vietnam, lo que llama poderosamente la atención es un grupo de artesanos, víctimas de las secuelas de la guerra, que tocan música a la entrada; y que en un pequeño espacio expositivo ofrecen sus trabajos manuales, donde, por increíble que parezca, se puede comprar un Papá Noel hecho con cuentas de colores… Imposible olvidar, pero ya todo está perdonado.
Vietnam: La vida en vena. Aproveche el momento dulce de Vietnam.
GUÍA PRÁCTICA
CÓMO LLEGAR
Vietnam Airlines (www.vietnamairlines.es) es la aerolínea de bandera vietnamita. Ha sido galardonada como aerolínea internacional de cuatro estrellas en reconocimiento por los servicios ofrecidos a los pasajeros. Tiene vuelos diarios compartidos con Air Europa que conecta con los aeropuertos de Hanoi y Saigón.
CÓMO MOVERSE
Para moverse por el país y buscar alojamiento con garantía merece la pena ponerse en manos de una agencia local y especializada en el sureste asiático como es Phoenix Voyages (www.phoenixvoyages.com), que también tiene representación en España.