Transportes

Los pasajeros podrán usar el billete de vuelta aunque no se haya usado el de ida

  • Estas reglas deben ser aprobadas por la Eurocámara y los Gobiernos

elEconomista.es

Entre los derechos de los pasajeros según el nuevo reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo destaca el de poder utilizar el billete de vuelta aunque no se haya usado el de ida; poder rectificar errores en el nombre o apellidos en el billete hasta 48 horas antes de la salida; transportar en cabina instrumentos musicales pequeños y poder presentar reclamaciones en el propio aeropuerto. Las compañías tendrán un plazo máximo de dos meses para responder.

Ayer se reunía el Consejo de Ministros de Transportes de la UE, que se celebra en Luxemburgo. En él la ministra de Fomento española, Ana Pastor, pidió que se permita llevar más de un bulto de mano y que se pueda utilizar el billete de vuelta sin haber usado el de ida, frente a las aerolíneas que anulan el regreso si el pasajero no ha disfrutado previamente del viaje de ida.

En cuanto a la regulación de la pérdida de vuelo de escala, Pastor defiende que la propia norma fije la atención, asistencia y compensación al pasajero, en lugar de que todos estos aspectos queden sujetos a la voluntad y negociación con las compañías implicadas.

Pastor en defensa de los pasajeros

La ministra de Fomento ha defendido que se refuercen los derechos de los pasajeros aéreos en el nuevo reglamento, y se ha mostrado contraria a que se amplíe a 5 horas las 3 horas actuales que dan derecho a indemnización por retraso.

Según las nuevas reglas, que deben ser aprobadas por la Eurocámara y los Gobiernos, las compañías aéreas sólo tendrán que compensar por retrasos de más de 5 horas (en lugar de 3 horas en la actualidad) y pagarán como máximo 3 noches de hotel. Pastor se mostró en contra de que se modifique el tiempo de retraso establecido para que se tenga derecho a indemnización.

En estos momentos existen propuestas para ampliarlo de las actuales tres horas a las cinco, algo con lo que España no está de acuerdo, ya que defiende que se mantengan los derechos adquiridos por los pasajeros y confirmados por el Tribunal de Justicia de la UE, un aspecto en el que los 28 se muestran divididos.

En el caso de los vuelos internacionales, el límite es de 9 horas para los vuelos de menos de 6.000 km y 12 horas para los vuelos de más de 6.000 km. El objetivo es dar a los transportistas aéreos un plazo razonable para resolver el problema y animarlos a efectuar el vuelo, en vez de cancelarlo.