Transportes y Turismo

Los puertos españoles ahorrarán 3.000 millones gracias a su digitalización

  • Un informe de OIM anticipa una importante reducción de gastos en la comunidad portuaria española
  • España se sube a la red global de puertos inteligentes para optimizar operaciones y mejorar la seguridad

elEconomista.es

La transformación digital de las infraestructuras portuarias es un proceso en marcha que está configurando un nuevo paradigma en la gestión del comercio marítimo. Un informe de la consultora Ocean Infrastructures Management (OIM), filial de consultoría de Ocean Capital Partners, pone cifras a esta evolución tecnológica y asegura que supondrá para la comunidad portuaria española un ahorro estimado superior a 3.000 millones de euros anuales, debido a la transición en marcha que permitirá crear una red global de puertos inteligentes.

Los puertos marítimos desempeñan un papel estratégico en el comercio mundial. Por ellos transita entre el 80% y el 90% del volumen del comercio internacional, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Transporte (UNCTAD). Además de su función logística, son centros neurálgicos para el transporte de pasajeros, cruceros, y actividades recreativas y deportivas. La gestión de estas infraestructuras críticas, sujeta a factores geopolíticos, económicos y ambientales, requiere una eficiencia operativa que garantice su sostenibilidad económica, social y ambiental, así como altos estándares de seguridad.

El informe destaca que la digitalización se ha convertido en una herramienta imprescindible y se encuentra en un punto de no retorno. Muchos puertos ya están adoptando tecnologías avanzadas para optimizar sus operaciones y mejorar la experiencia del cliente, con iniciativas que transforman estas infraestructuras en centros logísticos inteligentes, capaces de gestionar grandes volúmenes de carga con tiempos de espera reducidos.

En España, la Norma UNE 178110, publicada en 2024 por la Asociación Española de Normalización junto con Puertos del Estado, establece los criterios mínimos para que un puerto pueda considerarse "inteligente". Este modelo contempla una primera fase de análisis y recopilación de datos, seguida por la automatización y optimización de procesos, hasta alcanzar un estadio avanzado en el que confluyen cambios tecnológicos, organizativos y de modelo de negocio.

Un ejemplo ilustrativo de este avance es la plataforma "Puerta Virtual" del puerto de Barcelona, que permite realizar el 100% de los trámites burocráticos online y monitoriza en tiempo real las operaciones en los accesos a las terminales. Esta herramienta utiliza inteligencia artificial para elaborar modelos predictivos que mejoran la toma de decisiones en la cadena logística.

El proceso no es uniforme a nivel mundial. Cada puerto avanza a su propio ritmo, pero la tendencia apunta hacia la creación de una red global interconectada que integre las operaciones portuarias en el entramado logístico internacional. Los beneficios derivados son significativos y abarcan diversas áreas clave:

Más eficiencia, menos costes

La automatización de los puertos permite reducir tiempos de espera, incrementar la productividad, gestionar de forma remota la maquinaria, y mejorar la coordinación entre las partes involucradas. Estas medidas se traducen en una mayor eficiencia en la carga y descarga de mercancías, una gestión optimizada de flotas y suministros, y una disminución de errores operativos.

Esa eficiencia operativa incide directamente en la reducción de los costes asociados a las operaciones portuarias. Por ejemplo, el embarque digital (Electronic Bill of Lading), según la Asociación Digital de Transporte Marítimo de Contenedores (DCSA), podría generar ahorros globales de hasta 6.500 millones de dólares (unos 6.200 millones de euros) en el sector del transporte marítimo de contenedores, gracias a la eliminación del papel, la aceleración de los flujos y la mejora de la seguridad.

En el ámbito nacional, el informe de OIM estima que la digitalización generará un ahorro de más de 3.000 millones de euros anuales para las empresas de la comunidad portuaria española, gracias a la agilización de operaciones y la reducción del consumo de recursos.

Además, la automatización reduce el riesgo de colisiones y accidentes laborales, mientras que la monitorización en tiempo real permite detectar actividades irregulares, mejorar la manipulación de cargas peligrosas y agilizar las respuestas ante emergencias. Según datos de la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA), entre 2014 y 2022, el número de víctimas en accidentes marítimos en áreas portuarias descendió un 17%.

Por último, la digitalización permite monitorizar las emisiones y consumos energéticos, lo que facilita la identificación de medidas de eficiencia y reducción del impacto ambiental. Herramientas como los gemelos digitales y el análisis de datos permiten prever mantenimientos, alargar la vida útil de equipos, y reducir el uso de combustibles.

El camino hacia los puertos inteligentes también implica la incorporación progresiva de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA), el big data, el blockchain, la automatización avanzada, los gemelos digitales y la conectividad 5G. Estas herramientas permiten el desarrollo de plataformas digitales para gestionar operaciones y prestar nuevos servicios. La adopción de estas soluciones es clave para mantener la competitividad en un sector globalizado y regulado, donde cada minuto cuenta.

Según el informe, los puertos que no se adapten a esta transformación corren el riesgo de quedar rezagados y perder su posición en la red del comercio internacional. El viaje hacia la digitalización, aunque complejo, representa una oportunidad crucial para el sector portuario en España y en todo el mundo.