Transportes y Turismo

Boho Club, el oasis del lujo bohemio que cautiva a los nómadas digitales

Bungalows de categoría superior en los jardines del resort, ubicado en la Milla de Oro marbellí. Marta Ramos

Marta Ramos
Marbella (Málaga),

En la cosmopolita y ajetreada Marbella cuesta imaginar un lugar verde rodeado de árboles y frondosos jardines, donde el canto de los pajarillos despierte a los huéspedes cada mañana. Pero existe, así es Boho Club, una especie de oasis de lujo bohemio que cautiva a los viajeros más exigentes y que se ha convertido en un destino de referencia para los nómadas digitales, que acaparan ya el 10% del total de su variada clientela.

"Muchos trabajadores en remoto de todo el mundo están viniendo a vivir a Marbella, a veces se alojan en el hotel con el objetivo de adquirir posteriormente una vivienda en la zona y otras directamente pasan largas temporadas aquí, trabajando y disfrutando del buen tiempo y de todo lo que ofrece Boho Club", comenta a elEconomista Roberto Santamaría, hotel manager del resort.

Nada tiene que ver este hotel boutique de cinco estrellas con el resto de la oferta de la ciudad, lejos de rascacielos o grandes edificaciones, las habitaciones de este peculiar resort, rodeado de palmeras y grandes cactus, se reparten en casas blancas con puertas y ventanas color pastel y un interior que combina el retro chic con piezas modernas y de vivos colores.

Oferta gastronómica de alta cocina

Una especie de pueblo mediterráneo en el que se reparten 20 habitaciones estándar, 10 bungalows y una suite principal, que se complementan con dos piscinas exteriores climatizadas, una de ellas con un bar, zona de yoga, gimnasio al aire libre y un restaurante de alta cocina, Boho Restaurant, capitaneado por el chef Diego del Río (una Estrella Michelín) y abierto también a la comunidad local.

A eso se sumará a principios de 2024 un spa de estilo nórdico que contará con sauna, sistemas de frío y espejos con inteligencia artificial que mostrarán a los clientes los mejores ejercicios que pueden realizar según su tipo de cuerpo. "Es un concepto innovador que no existe en España", apunta Santamaria.

El hotel, que permanece abierto durante todo el año, cuenta en temporada alta con unos precios por noche que rondan entre los 1.000 euros para las habitaciones estándar y los 2.500 euros para los bungalows de categoría superior, mientras que en temporada baja parten desde 350 euros.

Clientes internacionales

El perfil de cliente es muy variado y además cambia considerablemente dependiendo de la época del año. A los mencionados nómadas digitales, se suman parejas, familias o grupos de amigos en verano y deportistas de élite en invierno. En cuanto a la nacionalidad, siguiendo la tendencia del segmento de gran lujo en Marbella, en los meses de julio y agosto los árabes de distintos países ocupan un amplio porcentaje de la clientela a los que se suman ingleses, belgas o nórdicos, entre otros muchos mercados.

"Uno de los dueños de la multinacional Uber vino para alojarse unos días y quedó tan encantado que finalmente pasó cuatro meses aquí viviendo", cuenta el hotel manager, haciendo hincapié en el trato personal y cercano que el hotel ofrece a sus huéspedes. "Aquí desde que entran todo es distinto, la música, los colores o el arte que inunda los jardines", añade.

Roberto Santamaría, hotel manager de Boho Club

Y es que otro de los aspectos que distingue a Boho Club es su apuesta por el arte con grandes esculturas de distintos artistas repartidas por el resort. 'Love Me' y 'Adam', dos grandes piezas de acero pulido, son de las obras más fotografiadas.

El hotel, ubicado en plena Milla de Oro en los terrenos de lo que fuera el Centro Forestal Sueco, abrió sus puertas con reto de convertirse en uno de los hoteles más chic de Marbella el 15 de diciembre de 2019. Pocos meses después la pandemia tambaleó todos los planes provocando casi el cierre definitivo.

80 millones para construir un nuevo hotel

"El inicio fue muy duro, se había realizado una gran inversión y estuvimos a punto de cerrarlo todo", recuerda Santamaría. Ahora, cuatro años después, nada queda de aquel complicado comienzo, Boho Club ha cerrado la temporada alta con una ocupación media que supera e 90% y tiene en marcha un plan de expansión con el que pretende convertirse en una cadena hotelera internacional.

De hecho, Quartiers Properties, promotora inmobiliaria sueca propietaria de Boho Club, anunció en verano un proyecto para construir otro hotel en el terreno colindante a las actuales instalaciones. Un resort con unas 100 habitaciones y varios restaurantes que supondrá una inversión que ronda los 80 millones de euros.

Una milla de oro que parece no tocar techo, ya que, a escasa distancia de estas instalaciones se están construyendo también los primeros proyectos de branded resicendes del país que llegan de la mano de las firmas FENDI Casa, Karl Lagerfeld y Dolce&Gabbana en colaboración con la promotora Sierra Blanca Estates.

"Estamos muy contentos y agradecidos por el apoyo que hemos recibido del Ayuntamiento de Marbella y el trabajo que están haciendo para desarrollar la ciudad. Ambos compartimos la misma visión del impulso de nuestras propiedades y de la zona circundante. Más habitaciones de hotel y restaurantes de la máxima calidad encajan bien con el desarrollo de la zona", destacaba Marcus Johansson Prakt, consejero delegado de Quartiers, cuando se presentó el proyecto.

Un plan de crecimiento que no se quedará solo en Marbella, la compañía está buscando ya otras localizaciones "con alma" para poder exportar la esencia de lujo bohemio que caracteriza a Boho fuera de la ciudad y posiblemente también en otros países. "Boho Club puede ser una gran cadena hotelera en el futuro, seremos un referente en la Costa del Sol", concluye el hotel manager.