Transportes y Turismo
Royal Caribbean vende su 40% de la concesionaria de los cruceros del Puerto de Barcelona
- Se desprende del porcentaje que tenía y la turca Global Ports Holding ostentará el 100% del capital
- La transacción se hace tras reactivarse la polémica licitación de una nueva terminal en la ciudad
Carles Huguet
Barcelona,
Royal Caribbean se deshace de su parte de las terminales de cruceros del Puerto de Barcelona. Tras reactivarse la licitación de la nueva terminal, suspendida en marzo tras las acusaciones de que estaba diseñada a dedo para ella, la naviera estadounidense se desprende del 38% que poseía de la concesionaria barcelonesa y vende la participación a su socio en el capital Global Ports Holding, que pasará a controlar la totalidad del accionariado.
Fuentes del sector explican a elEconomista.es que la transacción se cerró a la vuelta del verano y que rondó los 20 millones de euros. Así, la firma constituida en Liberia, pero con sede en Florida, da un paso atrás en su presencia en el embarcadero a pesar de la llegada de Jaume Collboni al consistorio, más favorable a la actividad crucerística que su antecesora, Ada Colau.
Contactada por este medio, Royal Caribbean se limitó a confirmar la desinversión de su participación minoritaria en la concesionaria. La venta se podría leer como una apuesta por la licitación de la nueva terminal, que debería tener un para comienzos del año que viene, según fuentes portuarias. La concesionaria gestionaba los muelles de cruceros A, B y C del muelle adosado y las terminales Norte y Sur del World Trade Center.
Global Port Holdings consolida su posición como mayor operador del mundo
A la espera de la resolución del nuevo concurso, Carnival gestiona otras dos terminales en el muelle adosado y MSC trabaja para tener lista la terminal F en 2024. Royal Caribbean es la única de las grandes operadoras mundiales que no tiene su propia infraestructura.
Queda por ver eso sí en qué términos se fallará la licitación de la última terminal del Puerto de Barcelona, que fue suspendida en marzo después de que Norwegian Cruise Line, Viking Ocean Cruises y Virgin Cruises –que se presentaron en alianza– denunciasen que se había hecho a medida para el gigante estadounidense. La conocida como terminal G tendrá una superficie superior a los 54.000 metros cuadrados y una línea de muelle de 450 metros de longitud, con capacidad para aparcar navíos de hasta 400 metros de eslora.
Royal Caribbean se deshace así de su participación en Barcelona Port Investments, la gran concesionaria del embarcadero catalán. La turca Global Ports Holding, la mayor operadora de cruceros del planeta, logra así incrementar su posición de dominio en el puerto que más cruceristas recibió en 2022 de todo el Mediterráneo.
Las cifras de la concesionaria
Además de la infraestructura barcelonesa, la sociedad posee el 100% de la concesión de cruceros del Puerto de Málaga, el 40% de SATS-Creuers Cruise Services (Singapur) y el 10% de Lisbon Cruise Terminal (Lisboa).
La sociedad ya saborea la recuperación turística y en 2022 multiplicó por más de cuatro sus ingresos, que saltaron de 4,68 millones a 21,33 millones. La cifra es inferior a los 27,74 millones registrados en 2019, antes del estallido del Covid.
La organización volvió además a beneficios, con unas ganancias de 4,59 millones tras acumular más de 16 millones de pérdidas en 2020 y 2021. La rentabilidad es inferior a la prepandémica. Contrasta con los beneficios 10,24 millones de 2019 y los 19,63 millones de 2018.