El turismo avanza hacia la recuperación en 2023
- Los principales grupos estiman que en 2023 se recuperará por complento la demanda
Judith Arrillaga
El sector turístico ha sufrido por el Covid-19 dos de los peores años de su historia, 2020 y 2021. Una crisis que este 2022 va empezando a dejarse atrás, aunque todavía no se han recuperado los niveles previos a la pandemia. La temporada de verano se cerró con un aumento notable y atípico de la actividad turística, que acelera hasta el 2,7% su crecimiento en el tercer trimestre en comparación con el mismo periodo de 2019.
Pese a la fuerte recuperación de las ventas en el tercer trimestre, las empresas turísticas muestran en lo que llevamos de año menores tasas de crecimiento respecto a los valores de 2019 si se compara con el resto de sectores de la economía española. Las compañías de la industria todavía no han recuperado los márgenes y resultados de 2019. Desde Exceltur, la patronal de la industria, explican que el alza de precios generalizada está frenando la recuperación de los beneficios previos a la pandemia de los grandes grupos.
Las restricciones a la hora de viajar ya son cosa del pasado, sin embargo, el sector sigue haciendo frente a nuevos problemas, como el incierto escenario económico provocado por el alza de los precios y la inflación. Sin embargo, el sector es optimista de cara a los próximos meses. Desde CaixaBank Research destacan la fortaleza de la industria debido a su baja exposición a los costes energéticos.
Los grandes grupos hoteleros afrontan los próximos 12 meses con optimismo. "Hay indicios que nos hacen pensar en una resiliencia de la demanda más allá de 2022, y a pesar de un posible cambio de ciclo económico", explican desde Meliá a elEconomista.es. "Existen algunos factores que nos hacen pensar en una temporada positiva, como las estimaciones de las grandes aerolíneas para el próximo invierno", añaden.
En una línea muy similar se pronuncian desde NH. "Las previsiones que manejamos para los primeros meses de 2023 son positivas, conviene recordar que enero y febrero son meses de temporada baja, por lo que han presentado históricamente menor demanda y ocupación. Aun así, lo cierto es que cuando se cotejan datos reales semana a semana, las reservas están por encima de los niveles prepandemia. Esperamos que esa tendencia siga activa durante todo 2023", detallan a este medio.
En lo que respecta a Riu, se muestran más cautos de cara a los próximos meses. "Para 2023 somos prudentes. Tendremos que esperar a que avance el año para ver si el deseo de viajar se mantiene fuerte, como este año 2022, o si todos estos condicionantes acaban contrayendo la demanda", detallan.