Telecomunicaciones

Huawei se desploma en España y reduce sus ingresos a la mitad en tan solo dos años

Un stand de Huawei

Javier Romera

Huawei se desploma en España en plena polémica por la adjudicación por parte del Gobierno de la custodia de datos sensibles procedentes de las escuchas judiciales. La tecnológica china ha reducido sus ingresos en tan solo dos años de 1.135 a 646 millones de euros, lo que supone una caída del 43%.

Aunque la empresa mantiene que los resultados operativos se han mantenido, Huawei ha pasado de ganar casi 30 millones de euros después de impuestos en 2022 a entrar en números rojos y cerrar el último ejercicio con unas pérdidas de 4,04 millones de euros. Desde la filial española admiten que "los últimos años han estado marcados por un entorno externo desafiante", pero insisten también en que "a pesar del escenario altamente complejo, Huawei España ha mantenido su firme compromiso con la innovación y ha continuado impulsando su actividad empresarial en el país, contribuyendo, junto con sus socios, clientes e instituciones, al desarrollo digital y al progreso del país, como lo ha hecho durante los últimos 24 años".

Adjudicación pública

La caída de los ingresos, tanto los procedentes de ventas como los derivados de la prestación de servicios, según los datos recogidos por Informa, va acompañada de un escalada de la polémica por la adjudicación por parte del ministerio del Interior por 12,3 millones de euros para la gestión y custodia de las escuchas judiciales. Interior lo justificó diciendo que era la oferta más barata y desde Huawei insisten en que cumplen con toda la normativa, pero la polémica amenaza con desatar un conflicto diplomático con Washington, que ha advertido ya de posibles sanciones comerciales y restricciones en materia de inteligencia. De momento, los congresistas republicanos Gus Bilirakis, presidente del Subcomité de Comercio, y Richard Hudson, presidente del Subcomité de Comunicaciones y Tecnología, han solicitado ya que el Departamento de Comercio de EE.UU que abra una investigación.

En una carta remitida al secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, fechada el pasado 8 de agosto, los congresistas expresan su "preocupación por las recientes decisiones del Gobierno español", que consideran tienen "importantes implicaciones" para el comercio digital, la seguridad de dos datos y los intereses de las telecomunicaciones de Estados Unidos.

Grave riesgo de seguridad

"Resulta profundamente preocupante que un aliado con un tratado utilice equipos y servicios de telecomunicaciones de una entidad alineada con el Partido Comunista Chino", afirman en la misiva, advirtiendo de que esto "supone graves riesgos para la seguridad nacional y económica" y recordando que, en 2019, la Administración Trump reconoció ya que estos riesgos eran inaceptables, prohibiendo a Huawei y ZTE participar en las redes de telecomunicaciones de Estados Unidos.

La carta de Bilirakis y Hudson sigue a la enviada a mediados de julio por el senador republicano Tom Cotton y el congresista Rick Crawford, en la que pedían a la directora de la Inteligencia Nacional norteamericana, Tulsi Gabbard, una revisión de sus acuerdos con España en este ámbito a raíz de este contrato con la multinacional china.

En la misma línea, la Comisión Europea insistió ya el pasado mes de julio en que los países de la Unión Europea deben "restringir o excluir a Huawei de sus redes 5G" porque la compañía china "representa un riesgo mucho mayor" que otros proveedores. "La falta de una acción rápida expone a la Unión Europea en su conjunto a un riesgo claro", aseguró a Efe el portavoz de Soberanía Tecnológica de la Comisión Europea, Thomas Regnier, preguntado por el acuerdo que España ha firmado con Huawei para el suministro de servicios de escuchas telefónicas.

En España, según adelantó ayer El País, Telefónica ha renovado hasta 2030 con Huawei el contrato del núcleo de su red 5G destinado a clientes individuales. Este contrato, suscrito en la etapa de José María Álvarez-Pallete como presidente, permite a Huawei mantenerse como un suministrador clave de Telefónica España en el núcleo de su nueva red 5G durante los próximos cinco años. El bajo precio ofertado por la china ha sido determinante para el acuerdo.