Telecomunicaciones

Los obstáculos para acceder a la red podrían taponar la instalación de centros de datos hasta dos años


Sergio Guinaldo

La segunda mesa de debate de la Jornada Empresarial: Centros de datos: España, nuevo "hub" europeo de la nube, contó con la participación de tres invitados —Hermenegildo Altozano, socio responsable del área de Energía de Pinsent Masons, Aina Juliol, presidenta ejecutiva del grupo PGI, y Rubén André, director de la unidad de negocio Buildings de Siemens en España y Portugal—, y fue moderada por Rubén Esteller, director adjunto de elEconomista.es.

Esta segunda mesa, titulada Infraestructura del futuro: Energía y centros de datos, arrancó abordando el posible boom o burbuja que atraviesa el sector, dado el gran interés por la instalación de este tipo de instalaciones.

"No creo que estemos ante una burbuja, sino que estamos ante una oportunidad y estamos además ante una solución para lo que podría ser un exceso de capacidad de producción que pudiera llevar en un momento determinado a una canibalización de los precios de electricidad en el pool", consideró Altozano, socio del despacho Pinsent Masons.

Los participantes de la mesa expusieron algunas de las virtudes que mostraron tener los centros de datos durante el apagón acontecido hace una semana, en el que todo el país sufrió durante varias horas una pérdida total de la electricidad. "En parte, creo que ha sido una ventaja tener este apagón porque hemos hecho la prueba de estrés total, o sea, un blackout total, no vista hasta ahora. Las tecnologías y nuestros datacenters han tenido resiliencia y realmente han estado a la altura", señaló Juliol, presidenta ejecutiva del grupo PGI.

También se expuso el talento que posee España para desarrollar esta tecnología. "Tenemos las mejores universidades a nivel mundial, y tenemos un 30% más de investigadores que se dedican a la inteligencia artificial que Estados Unidos. El reto que veo es cómo podemos quedarnos con el talento en España y en Europa", indicó André, director de Buildings de Siemens en España y Portugal.

Sin embargo, se quejaron de la alta complejidad burocrática y administrativa que conlleva instalar un centro de datos en el país. "Hay un potencial enorme para los centros de datos en España, pero el problema que tenemos en el país es que es demasiado complejo que los centros de datos puedan establecerse aquí. Creo que es muy importante que simplificamos un poco la regulación", aseveró André.

También, señalaron la necesidad de invertir en la red, para que así pueda cobijar nuevos proyectos.

"Por un lado, ves un discurso público que queda muy bien, en el que vamos a convertir a España en el nuevo hub europeo para la nube y los datacentres, pero luego, llegado el momento, tienes dificultades, porque no tienes una red eléctrica diseñada para el perfil de demanda de 2025, sino que la tienes todavía con el perfil de demanda de un país de instalaciones industriales", contrapuso Altozano.

Los tres participantes coincidieron en la necesidad de desmentir algunos bulos en torno a esta tecnología, como que no generan empleo, que requieren muchísima agua o que demandan grandes cantidades de energía. "Desde la perspectiva de diseño, la eficiencia energética se tiene desde el minuto uno. Siempre diseñamos pensando en la optimización máxima de esa energía, ya sea para refrigeración o para los equipos, por lo que se está mejorando mucho en la huella de carbono", puntualizó Juliol.

Sin embargo, no mostraron una opinión unánime respecto a cómo evolucionarán las inversiones en el país tras el episodio del apagón. Mientras que para el director de la unidad Buildings de Siemens el apagón sirvió como un reto que los centros de datos superaron —y que, por tanto, atraerá más a los inversores a nuestro país—, la presidenta ejecutiva del grupo PGI temió que algunos inversores se replanteen invertir en España. "Aquí rompo una lanza a favor del sistema eléctrico español, ya que creo que estamos ante uno de los mejores sistemas eléctricos del mundo. La pregunta es, si estuviera trabajando en un banco de inversión y tuviera que recomendar, tendría que hacer un análisis de todos los sistemas eléctricos del mundo para ver si en una situación similar a la que se ha producido en España habría la misma respuesta y la capacidad de recuperación de la generación tan rápida que hubo en el caso de España", concluyó el socio responsable del área de Energía de Pinsent Masons.