Telecomunicaciones y tecnología
Helena Herrero: "La innovación debe formar parte de la agenda estratégica de este país, es algo crítico"
Antonio Lorenzo
Innovación, talento, educación, transformación, privacidad, impresión 3D, informática inmersiva, robótica, blockchain, ciberseguridad, la hiperconectividad... Helena Herrero, presidenta de HP España y Portugal, contagia su entusiasmo cuando conversa sobre cada una de las grandes tendencias que facilitan la vida de las personas y las organizaciones.
En un encuentro con elEconomista, en el marco del reciente HP Innovation Summit, la directiva recalca el valor de la tecnología como elemento habilitador para el progreso. También aboga por incluir la innovación en la agenda de los principales temas políticos del momento.
¿Qué mensaje elevaría estos días al Gobierno?
Este país necesita avanzar y reconocer a la innovación toda la importancia que tiene. Si queremos que España juegue un papel importante en el futuro debemos hablar de talento. En este sentido, la innovación debe formar parte de la agenda estratégica del país. Es crítico.
¿Qué círculo virtuoso considera que ofrece la innovación?
Las ventajas son incuestionables. Si queremos tener una posición relevante en la economía del siglo XXI tenemos que considerar la innovación como un pilar fundamental. A mayor innovación se produce un mayor progreso. Y cuanta mayor diferenciación, también habrá una mayor capacidad competitiva, desarrollo en los puestos y más valor añadido. De esa forma, los puestos repetitivos, de bajo valor o escasa diferenciación, serán susceptibles de ser eliminados.
¿España cojea en innovación?
No digo que no esté presente la innovación y la educación en el país, sino que necesitamos que forme parte de algo importante. Creo que la tecnología debe entenderse como un habilitador del negocio, no sólo como un elemento para ahorrar costes y ser más eficientes. Es un cambio de paradigma. Debemos fomentar las capacidades transversales, la creatividad, el trabajo en equipo y entender la tecnología como el elemento que nos va ayudar a transformar. Eso no quiere decir que todo el mundo tenga que estudiar tecnología, pero sí que se entienda que la tecnología es el nuevo lenguaje, como el nuevo inglés de la sociedad.
En el HP Innovation Summit me ha sorprendido el llamamiento colectivo a desaprender y a aprender continuamente. ¿Qué significa esto?
Así lo exige la tecnología. El 65% de los jóvenes que actualmente estudian no pondrá en práctica su formación en trabajos u ocupaciones actuales, según se puso de relieve en el último Foro de Davos. Y estoy de acuerdo: tenemos que formar a futuros profesionales que sean capaces de aprender y desaprender de forma permanente.
¿Qué queda por hacer para impulsar la digitalización de las empresas españolas?
Se ha avanzado bastante pero queda mucho trabajo por delante. Creo que el tamaño de las empresas que tenemos en el país condiciona mucho, porque no solo tenemos muchas pymes, sino que éstas son muy pequeñas, lo que dificulta el acceso a la financiación. También tienen menos capacidad de entender cómo se puede innovar, por ejemplo. Algunas empresas hacen pinitos para entender que pueden abrir nuevos negocios, crear nuevas ofertas, complementar la fidelización del cliente con ofertas personalizadas. Nos queda mucho por hacer.
¿Cómo explica los cambios tecnológicos tan trepidantes que nos está tocando vivir?
Lo que estamos viviendo es una disrupción en todas las áreas de todas las compañías. Antes, esto solo afectaba a las grandes empresas, pero ahora salpica a medianas y pequeñas, con una disrupción y cambio de modelos. Los medios, la música, la banca, cualquier sector habla de digitalización. No hay un consejo en el que no se analice el impacto de la digitalización en sus modelos de negocios. Pero una cosa es hablar de la teoría y otra de cómo cambiar la mentalidad para abrir nuevos mercados y para desarrollar nuevos productos.
¿Veremos en las instalaciones de HP en Sant Cugat el primer corazón impreso en 3D?
Siempre trabajamos con ecosistemas y puede ocurrir que alguna empresa descubra alguna aplicación en ese sentido. Por ejemplo, las válvulas en el corazón ya están personalizadas y se hacen en 3D. Para un hígado o un riñón necesitamos tejido y eso son otras ligas. Se está investigando mucho, pero por ahora no hay ningún anuncio.
Veo que en asuntos relacionados con el 3D gran parte de la fuerza procede de las alianzas.
Sí, en el mundo de la impresión 3D, la mejor forma de llegar al mercado pasa por las alianzas, trabajando en ecosistemas formados por jugadores de diferentes sectores que saben mucho de sus respectivos negocios. Esta revolución produce cambios exponenciales -no lineales-, que causan desasosiego por el impacto que supone.
¿Cuál es la tarea que se impone HP en esta sociedad hiperconectada y cada vez más comprometida con la tecnología?
Creo que aportamos visión y ayudamos a nuestros clientes en la adquisición de tecnología y en los nuevos usos de ella, para hacerlo de una manera sostenible. Aportamos nuestras estaciones de trabajo, apostamos por mundo virtual, impulsamos áreas como la colaboración, la creación de contenidos, los nuevos dispositivos del hogar... promovemos una gran transformación del mundo analógico al digital en todos los sectores de actividad.