Tecnología y Logística
Heineken prueba en Sevilla un piloto de reparto de última milla verde
- Incorpora una flota de ciclomotores eléctricos para el reparto en el centro histórico
- Han sido diseñados para el transporte de cerveza junto a la start-up andaluza Scoobic
- Evitará la emisión de más de 21.450 toneladas de CO2 cada año en la ciudad
elEconomista.es
Heineken España ha puesto en marcha un proyecto piloto de reparto verde de última milla pionero en nuestro país, que arranca en Sevilla con objetivo de extender este modelo de movilidad sostenible a otras capitales, y que busca evitar la emisión de más de 21.450 toneladas de CO2 cada año en la ciudad.
La iniciativa consiste en la incorporación de una flota de ciclomotores eléctricos a su reparto de última milla para distribuir cerveza a bares y restaurantes.
Estos vehículos cero emisiones y específicamente diseñados para el transporte de cerveza junto a la start-up andaluza Scoobic, repartirán Cruzcampo por los bares del barrio de Santa Cruz.
Con una capacidad de carga de hasta 500 kg (8 barriles), tienen una autonomía de 150 kilómetros en desplazamientos urbanos y una cilindrada de 49 centímetros cúbicos. A ello añaden sus reducidas dimensiones -solo un metro de ancho y casi 3 de largo- y su menor peso, que les permiten circular por las calles más estrechas a una velocidad de 7 km/h.
Generación de empleo
Asimismo, la incorporación de estos vehículos a la flota de reparto impulsa la generación de empleo en la ciudad, con la próxima apertura de la fábrica de vehículos híbridos de la start-up. Este centro supone una inversión de más de 13 millones de euros y generará más de 200 empleos directos.
La cervecera apuesta por la colaboración público-privada en este proyecto mediante un acuerdo firmado con el Ayuntamiento hispalense a través de Aussa, la empresa encargada de gestionar los aparcamientos públicos. El proyecto busca testar los beneficios ambientales y sociales de esta iniciativa para diseñar el plan más adecuado para fomentar la movilidad y el transporte sostenible en la ciudad.
Entre los objetivos se encuentran la lucha contra el cambio climático y crear espacios de vida más agradables en los núcleos urbanos: descongestionando el tráfico, reduciendo la contaminación acústica y visual, mejorando la calidad del aire y la salud de los ciudadanos, y al mismo tiempo cuidando el suelo histórico y el patrimonio cultural de los cascos antiguos.
Heineken España sitúa así a Sevilla como ciudad puntera en materia de movilidad sostenible, sumándose a la tendencia de capitales como Estocolmo o Londres, que se han convertido en referentes en la última década por sus iniciativas verdes y políticas de inversión en infraestructuras sostenibles.