Philips consolida el liderazgo en tecnología médica
- Su visión 360º de la salud le hace estar presente en prevención y diagnóstico
- Crea equipos quirúrgicos de alta precisión y sistemas de información corporativos
Sérvula Bueno
Más de 125 años de historia avalan el rigor y el buen hacer de la empresa de origen holandés Philips. Sin perder de vista la premisa que la vio nacer en el año 1891 en Eindhoven -mejorar la vida de las personas por medio de la innovación-, la multinacional sigue avanzando para convertirse en el líder mundial de la tecnología médica y de la salud.
Un cambio de rumbo que comenzó en el año 2015 y que hoy le permite contar con una destacada posición en este mercado, tanto a nivel internacional como en nuestro país. Así, en palabras de Juan Sanabria, presidente de Philips Ibérica, "en el espacio de la salud profesional, Philips es claramente líder en tecnología e innovación de la salud y está presente en todos los hospitales relevantes de España".
Pero, ¿qué convierte a Philips en el mejor socio para los sistemas sanitarios? Quizás, su visión 360º de la salud, lo que le hace estar presente en áreas como la prevención, el diagnóstico, el tratamiento o la gestión de enfermedades crónicas. Pero también, su capacidad de crear desde equipos quirúrgicos de alta precisión -como electrocardiógrafos o herramientas de monitorización- hasta sistemas de información corporativos o soluciones de cuidados respiratorios y del sueño.
En el segmento de la atención sanitaria destacan las soluciones de informática clínica que Philips pone a disposición de los centros sanitarios para agilizar la recopilación y análisis de datos de pacientes procedentes de diferentes sistemas, generar eficiencias en los planes de cuidados y optimizar los flujos de trabajo. En este sentido, conviene destacar su plataforma de post-procesado y visualización avanzada, que permite a los clínicos acceder a las pruebas de imagen médica del paciente, desde cualquier lugar y en cualquier momento; un sistema de monitorización de pacientes que informa sobre las constantes vitales y que permite integrar los datos del paciente directamente en la historia clínica electrónica; o el software de gestión de información e imagen que agiliza el flujo de trabajo y mejora el rendimiento operativo en los tratamientos cardiovasculares.
También, Philips es pionero en el ámbito de la patología digital con una solución única que permite digitalizar los laboratorios patológicos. Esta tecnología ayuda a los patólogos a visualizar y diagnosticar enfermedades, convirtiendo muestras físicas de tejido en imágenes digitales de altísima resolución, que se pueden analizar desde una pantalla de ordenador, algo impensable hasta hace bien poco -la herramienta convencional de trabajo del patólogo es el microscopio-.
Asimismo, eliminar la complejidad para mejorar la productividad y organizar los cuidados de manera continuada es otro de los objetivos prioritarios de Philips. Por eso, en áreas con gran demanda de cuidados de enfermería, la multinacional ha desarrollado herramientas automatizadas que ofrecen una imagen completa del estado del paciente, simplifican la documentación médica y permiten un mejor uso de los recursos de personal. Es el caso de su sistema de gestión de alarmas para unidades de cuidados intensivos, que detecta las desviaciones significativas en las lecturas de los signos vitales de los pacientes; una herramienta de la que ya se benefician centros como el Orlando Regional Medical Center (Florida), entre otros.
Al hilo de lo anterior, y para ayudar también a los profesionales sanitarios, Philips cuenta con soluciones que emiten diagnósticos más rápidamente y con técnicas menos invasivas. Por ejemplo, el TAC con detector espectral ayuda a los profesionales sanitarios a describir una lesión hepática mediante una mejor visualización, mientras que la tecnología de modelado anatómico inteligente 3D permite realizar exámenes ecocardiográficos y reducir la variabilidad, ya que ofrece información crucial en cuestión de segundos.
Resonancia magnética
Lo cierto es que la tecnología sanitaria ha cambiado de forma sustancial la forma de concebir el diagnóstico médico y, en esta transformación, las aportaciones de Philips han sido cruciales. De hecho, en palabras de Sanabria, "Philips lleva todos estos años trabajando en el desarrollo de innovación y ha sido una de las empresas que más ha contribuido en muchas áreas clave. Por tecnologías, destacaría rayos X, tomografía axial computarizada (TAC), resonancia magnética, medicina nuclear, intervencionismo mínimamente invasivo, ecografía y monitorización, entre otras muchas".
Precisamente, en el ámbito de la resonancia magnética (RM), se han hecho avances importantes que permiten mejorar la experiencia de los pacientes, pues brindan una atmósfera que lo evade de la sala mediante diferentes ambientes relajantes.
En concreto, destacan las soluciones de resonancia magnética que ofrecen un camino más rápido e inteligente hacia un diagnóstico seguro, elevando el nivel de los cuidados. Una de estas soluciones constituye un avance avance revolucionario en calidad diagnóstica y en velocidad, pues ofrece técnicas innovadoras de RM, creando nuevos senderos para la investigación clínica en imágenes de 3,0 T mediante nuevos diseños de gradientes y radiofrecuencia. Otra de las soluciones de RM se basa en el imán BlueSeal, permitiendo realizar operaciones de RM sin helio, mientras que otro de estos instrumentos de RM ofrece exploraciones rápidas de alta calidad en una gran variedad de aplicaciones avanzadas.
Imágenes moleculares
La multinacional holandesa también ha puesto el foco en la medicina molecular. De este modo, la adquisición de imágenes moleculares avanzadas de Philips está transformando la atención, pues permite obtener imágenes híbridas y moleculares a baja dosis, lo que se traduce en una mejora a la hora de detectar lesiones y una mayor capacidad de compartir diagnósticos.
En la práctica, las innovaciones que ha incorporado Philips hacen referencia a la tecnología time-of-flight para PET, el sistema híbrido SPECT/CT y el sistema PET/RM de cuerpo entero.
Time-of-flight es una tecnología propiedad de Philips que mejora la calidad de la imagen mediante la reducción de ruido y el incremento de la sensibilidad. La novedad, en este sentido, es que la multinacional ha incorporado esta tecnología en las pruebas PET, un tipo de diagnóstico por imágenes de medicina nuclear. Ello ha dado lugar al primer PET/TC digital del mundo, con el que se descubren lesiones más pequeñas, más rápido y con menores dosis de radiofármaco.
Otro de los puntos en los que incide Philips son los sistemas de intervención guiada por imagen real para la creación de quirófanos híbridos. Su solución en esta área se posiciona en la vanguardia de la terapia guiada por la imagen. Su motor ConnectOS permite a varios especialistas trabajar de forma simultánea. Entre los beneficios que brinda cabe destacar la atención médica excepcional y un desempeño más optimizado en la sala de intervención.
Cuidados respiratorios
En este recorrido por las principales innovaciones de Philips no puede pasar de largo su segmento Philips Respironics, líder en dispositivos de cuidados respiratorios y terapia del sueño. Por ejemplo, su amplio portfolio de tecnologías de terapia de la apnea del sueño permiten que el tratamiento se desarrolle según lo previsto. Por su parte, las soluciones de oxigenoterapia estacionarias y portátiles ofrecen a los usuarios libertad y flexibilidad.
Cada vez más instituciones sanitarias ven la necesidad de contar con un socio tecnológico como Philips. Así, como explica Juan Sanabria, "en España, Philips tiene ya numerosos ejemplos de grandes acuerdos con importantes instituciones como el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares, el Hospital Universitari i Politècnic La Fe de Valencia, el Sergas de Galicia, el Hospital Campus de la Salud de Granada o el Hospital Universitario de Salamanca".
El propósito de la multinacional es continuar trabajando para aportar innovaciones significativas en la sanidad que superen límites y reduzcan complejidades, siempre con la mirada puesta en mejorar la vida de 3.000 millones de personas cada año de aquí a 2030.