Salud Bienestar

El superalimento que ayuda al sistema inmunológico, es una gran fuente de energía y contribuye al buen estado de los huesos

Los boniatos son unos tubérculos con una forma normalmente alargada y de distintos colores | Fuente: iStock.

Raúl González Pérez

En menos de dos meses comienza el periodo navideño. Por tanto, estas fechas son claves para empezar una dieta y así quitarte los kilos de más. Para que tenga éxito, lo más recomendable es realizar ejercicio físico habitualmente, mantener unos buenos hábitos y llevar una vida activa.

Los superalimentos son una gran opción para incorporarlos en tu día a día, debido a que son ricos en nutrientes, especialmente fibra, antioxidantes, vitaminas o ácidos grasos. Todos ellos tienen una gran cantidad de beneficios para la salud, minimizan el riesgo de enfermedades y mejoran el estado físico y emocional.

Beneficios

Uno de ellos es el boniato, una planta de la familia de las Convolvulaceae cultivada mayoritariamente por su raíz tuberculosa comestible y que contiene una gran variedad de vitaminas y minerales como el potasio, el fósforo o el calcio, siendo además un fuente importante de vitaminas A y C.

Entre sus propiedades más importantes, conviene señalar:

  • Vitamina A. Contiene betacarotenos que se transforman en vitamina A en el organismo, la cual es buena para la piel y la vista.
  • Vitamina C. Es un potente antioxidante, ya que ayuda a mantener jóvenes tus células.
  • Vitamina E. Ayuda a mantener sano y salvo el sistema nervioso, cardiovascular y los músculos.
  • Fuente de potasio. Mantiene tus músculos y sistema nervioso sano.
  • Energético. Ideal para aquellas etapas de la vida en las que se requiere aumentar la energía, como la infancia, el embarazo...
  • Mejora las molestias digestivas. Es un alimento de fácil digestión y muy bueno para los deportistas.

¿Cuál elegir en el supermercado?

Aunque el boniato es muy estacional, su temporada es de septiembre a diciembre. ¿El motivo? Está claro: su sabor dulzón y su textura lo convierten en uno de los alimentos por excelencia del otoño tanto para platos principales salados como para postres.

Hay que tener en cuenta que son muy frágiles, por lo que es conveniente escoger aquellos de aspecto firme. Una vez en casa, deben almacenarse en un lugar fresco, seco, oscuro y bien aireado, igual que las patatas. Si es alta la temperatura, el boniato puede germinar.