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Salud Bienestar

Murió el té verde: la infusión milagrosa con propiedades digestivas, antiinflamatorias y antioxidantes que es ideal para todos los días

Té de hierbas con bayas, frambuesas, hojas de menta y flores de hibisco. Firma: iStock
elEconomista.es

Una buena alimentación es sinónimo de una buena salud. Si conocemos las propiedades de los alimentos, podremos aprovechar al máximo sus beneficios para nuestro organismo. Las infusiones, una de las bebidas más consumidas del mundo, también son recomendables para que nuestro cuerpo funcione correctamente.

Hay infinidad de opciones de plantas para elaborar un té, cada una aporta unos beneficios diferentes por lo que hay opciones que se adaptarán mejor a las necesidades o problemas de cada uno. En el caso concreto de los frutos rojos, también conocidos como frutos del bosque, ofrece un gran valor nutricional y sabor intenso, además de un color característico.

La infusión de frutos del bosque está compuesta por frambuesas, ciruelas, grosellas, arándanos, fresas o moras principalmente. Es un té perfecto por sus propiedades y porque se ajusta a las temperaturas, dando igual tomarlo en frío o en caliente.

Beneficios y propiedades del té de frutos del bosque

  • Ayudan a mejorar la salud cardiovascular. Los frutos rojos, sobre todo el arándano, son vasodilatadores, algo que beneficia al sistema circulatorio porque reduce la presión arterial.
  • Reducen el colesterol malo. Siendo muy recomendables para personas que lo tienen alto.
  • Contribuyen al cuidado y al aspecto de la piel. Esto se debe a su gran cantidad de antioxidantes que mantienen la dermis mejor hidratada, estando más tonificada y flexible.
  • Interviene en la mejora de la memoria y la agilidad mental. Debido a su capacidad de combatir los radicales libres
  • Ayuda a prevenir la anemia. Porque la mayoría estas frutas tienen un alto contenido en hierro y vitaminas de grupo B y C.
  • Contribuye a reducir los dolores y el malestar. Al tener una gran cantidad de antioxidantes como flavonoides, actúan como un antiinflamatorio natural.
  • Ayuda a conciliar el sueño y descansar de forma placentera. Las cerezas tienen una gran cantidad de melatonina que mejora los hábitos del sueño; las fresas tienen altos niveles de triptófano que permite dormir de forma duradera, sobre todo en edades avanzadas.