Salud Bienestar
Si quieres vivir una vida más feliz a los 60 años y más, empieza a decir adiós a estos 5 hábitos
- Tener una vida más tranquila y menos estresante es el objetivo de muchas personas para este 2025
- La enfermedad silenciosa que es irreversible y se desarrolla con mayor frecuencia en personas a partir de los 60 años
- El eclipse total de luna se puede ver en diferentes provincias de España esta madrugada: este es el mejor horario
Raúl González Pérez
Las nuevas tecnologías y el ritmo frenético de la vida cotidiana han provocado que sea prácticamente imposible dedicar 24 horas a una cosa porque pretendemos hacer muchas más a lo largo del día. Es decir, se espera mucho más de nosotros y, a su vez, nosotros mismos también nos exigimos cada vez más.
Y esto, en ocasiones, puede pasarnos factura tanto a corto como a largo plazo. Por ello, es importante priorizar la calidad a la cantidad, la intención sobre la velocidad y de encontrar espacio para lo que realmente nos importa (hobbies, ocio, amigos, familia...).
Ante este panorama, hay que destacar algunos hábitos que deberíamos abandonar, o al menos contemplar y pensar muy profundamente sobre ellos, para disfrutar de una vida más tranquila y equilibrada. ¿Por qué? Está claro: se han viralizado en las redes sociales.
Decir sí a todo
Por temor a perder oportunidades o por agradar a otras personas, muchas veces decimos sí por inercia. Y, de primeras, es algo inofensivo. Eso sí, con el paso del tiempo puede sobrecargarnos y dejarnos sin energía para lo realmente importante. Hay que preguntarnos, antes de aceptar un compromiso, si realmente encaja con nuestras prioridades.
Vivir obsesionado con producir cada día más
Es muy fácil, en la actualidad, caer en la tentación de creer que nuestro valor se determina por lo que hacemos. Pero no es así. Y esto puede agotarnos en un gran porcentaje tanto física como mentalmente y privarnos de momentos de descanso. El ser es tan valioso como el hacer.
La multitarea mental
Es muy habitual que el ritmo tan rápido de la vida nos lleve a desviar nuestra atención entre otros pensamientos mientras intentamos llevar a cabo nuestras tareas diarias. Y puede resultar agotador e incrementar el estrés. La solución más viable es centrarse es el momento, enfocándonos completamente en lo que estamos haciendo.
Buscar aprobación de manera continúa
A todos nos encanta que nos valoren. Y que nos valoren bien. Pero depender única y exclusivamente de la validación externa puede obligarnos a perder de vista lo que realmente nos importa. Es muy necesario que tomemos decisiones basadas en nuestros valores, siéndonos siempre fieles a nosotros mismos.
Perseguir la perfección
Está bien que nos centremos en hacer las cosas bien. Pero de ahí a querer ser siempre perfectos hay un largo camino. De hecho, puede ser un gran obstáculo para nuestra paz mental. Es conveniente no obsesionarnos con hacerlo todo perfecto, sino concentrarnos -y disfrutar en la medida que se pueda- del proceso y el progreso.