Ni en mayo ni en julio: si tu hijo ha nacido en uno de estos 3 meses va a ser más inteligente, según la ciencia

El estudio del ser humano y su complejidad es algo que continúa haciéndose año tras año por parte de investigadores y expertos, con el fin de encontrar soluciones o respuestas a muchos de los problemas de hoy en día. Una de las más recientes y más curiosas es la que ha llevado a cabo la Universidad de Harvard sobre cómo afecta el mes en el que nacen los bebés a su nivel de inteligencia, con resultados muy particulares.

Esta diferencia más allá de un factor genético, se debe a un tema de combinación de diferentes factores. Este estudio se basó en la investigación de miles de niños desde que nacieron hasta los siete años y se descubrió que los niños nacidos en los meses de octubre, noviembre y diciembre tienen unas capacidades cognitivas mayores que otros nacidos el resto del año.

La explicación de esto es que los niños nacidos en los últimos meses del año aparentan tener un rendimiento cognitivo mayor debido al contexto académico y social en el que se desarrollan, puesto que la diferencia con otros compañeros de clase nacidos en los meses de enero es muy notable. Los pequeños que nacen los primeros meses del año están mucho más desarrollados que los que nacen a finales, por lo que estos últimos deben enfrentarse mayores desafíos académicos.

Más esfuerzos por "encajar"

Estos desafíos repercuten de manera positiva, puesto que les "obliga" a esforzarse mucho más que el resto, logrando desarrollar mayores habilidades académicas, sociales y emocionales, estimulando así el desarrollo cognitivo y emocional, así como la creatividad. Asimismo, en el terreno de las habilidades sociales, esto también tiene efectos notables, puesto que este tipo de niños son capaces de adaptarse a nuevos entornos y cambios más fácilmente, mostrando un comportamiento más maduro y equilibrado.

Basándose en esto último, los investigadores sugieren que estos niños son conscientes de sus diferencias con respecto al resto, por lo que se "esfuerzan" más para lograr integrarse, fomentando una mejor comunicación y habilidades sociales de cara al futuro y, por tanto, una mayor garantía de lograr el éxito en el terreno profesional.

Influencia de otros factores

En cualquier caso, los padres han de procurar potenciar la curiosidad y el aprendizaje de los más pequeños, puesto que, aunque el mes de nacimiento influye en la personalidad de los más pequeños, no es un factor del todo determinante, ya que existen otros muchos que pueden tener consecuencias directas.

En general, la inteligencia es un rasgo complejo e influenciado por factores genéticos y ambientales, tales como el entorno familiar, el tipo de crianza que reciba, la educación, la disponibilidad de recursos de aprendizaje, así como la salud y el estilo de vida en general.