Pierpaolo Piccioli toma las riendas de Balenciaga: un nuevo capítulo entre la herencia y la vanguardia
- Asumirá el cargo oficialmente el 10 de julio de 2025, y su primera colección será presentada en la Semana de la Moda de París en octubre
Lucas del Barco
El mundo de la moda ha recibido con expectación una noticia que promete reconfigurar el paisaje del lujo contemporáneo: Pierpaolo Piccioli, el renombrado diseñador italiano, ha sido nombrado nuevo director creativo de Balenciaga. Asumirá el cargo oficialmente el 10 de julio de 2025, y su primera colección será presentada en la Semana de la Moda de París en octubre. Se trata de una transición histórica que marca el fin de la era de Demna y el inicio de una etapa que busca equilibrar la audacia con la elegancia clásica.
Piccioli, de 57 años, es ampliamente reconocido por su enfoque romántico, sofisticado y profundamente humano en Valentino, donde trabajó durante 25 años. Allí, primero junto a Maria Grazia Chiuri y luego en solitario, modernizó el lenguaje de la alta costura, dotándolo de diversidad, emoción y una paleta de colores atrevida. Desde su salida de Valentino en marzo de 2024, el diseñador se había mantenido en silencio, mientras los rumores sobre su próximo destino se multiplicaban.
Balenciaga, bajo el paraguas del conglomerado Kering, fue durante los últimos diez años el laboratorio estético de Demna, quien convirtió la casa en sinónimo de provocación, con zapatillas voluminosas, sudaderas de hombros caídos y un aire apocalíptico que cautivó a la generación Z. Demna ahora dirige el destino creativo de Gucci, el buque insignia de Kering, en un movimiento estratégico que responde a la necesidad de revitalizar aquella icónica casa italiana.
La llegada de Piccioli a Balenciaga simboliza algo más que un simple cambio de guardia. Representa un giro de sensibilidad, una apuesta por un diseño más emocional, aunque sin renunciar a la audacia que ha caracterizado a la firma desde sus inicios. En una emotiva carta publicada el lunes, el diseñador evocó su admiración por Cristóbal Balenciaga, al que considera una de las figuras más influyentes de la historia de la moda. "Ha hecho todo antes que todos", escribió Piccioli. "Ha infundido la idea de la alta costura en cada aspecto de su carrera".
Aunque se espera que imprima su sello personal, Piccioli dejó claro que no pretende borrar lo logrado por sus predecesores. "Balenciaga es lo que es hoy gracias a todos los que allanaron el camino. Cristóbal, Nicolas [Ghesquière], Alex [Wang], Demna… Cada etapa ha mantenido viva la estética de la casa mientras evolucionaba constantemente", afirmó. Su visión es construir sobre ese legado y añadir un nuevo capítulo a la narrativa del icónico taller fundado en París en 1937.
El nombramiento fue confirmado por Kering a través de un comunicado en el que destacaron la "visión única" de Piccioli y su "amplia experiencia". Francesca Bellettini, directora ejecutiva adjunta de desarrollo de marcas de Kering, lo definió como "uno de los diseñadores más talentosos y celebrados de la actualidad". También agradeció a Demna por "la audaz y distintiva visión" con la que definió la identidad de Balenciaga en la última década.
Por su parte, Gianfranco Gianangeli, director ejecutivo de Balenciaga desde enero de 2025, expresó su entusiasmo por iniciar esta "nueva era" con Piccioli. "Su visión creativa prosperará aquí. Sabrá interpretar perfectamente el legado de Cristóbal Balenciaga y construir sobre la creatividad audaz, el rico patrimonio y la sólida cultura de la casa", declaró.
El calendario de la moda para este otoño se presenta vibrante, con estrenos de nuevos directores creativos en casas como Gucci, Chanel, Loewe o Versace. El debut de Piccioli en Balenciaga promete ser uno de los más esperados.
Balenciaga, con más de 270 tiendas en todo el mundo y una facturación estimada superior a los 2.000 millones de euros, prepara también el lanzamiento de nuevas fragancias en 2025 bajo la división Kering Beauté. En medio de una ligera caída de ingresos en el primer trimestre del año, la firma continúa siendo uno de los nombres más sólidos del conglomerado francés, en parte gracias al éxito sostenido de sus bolsos Le Cagole, Rodeo y Bel Air.
Cristóbal Balenciaga cerró su casa en 1968 y falleció en 1972, pero su legado de formas arquitectónicas y cortes impecables sigue siendo una fuente de inspiración. Piccioli ya le rindió homenaje en 2018 con una colección cápsula de plumíferos para Moncler que evocaba los volúmenes escultóricos del maestro.
"Balenciaga es una marca llena de posibilidades, increíblemente fascinante", escribió Piccioli. "No podría haber pedido un mejor traspaso de antorcha. Ahora es el momento de escribir una nueva historia."
El diseñador trasladará su residencia a París para dedicarse por completo a su nueva casa. Con su llegada, Balenciaga se adentra en una etapa en la que la sensibilidad artística y la innovación prometen encontrar un delicado y poderoso equilibrio.