La maravillosa sonrisa imperfecta de Aimee Lou Wood en 'The White Lotus', a debate
Lucas del Barco
"I love your teeth. You're from England, right?" ("Me encantan tus dientes. Eres de Inglaterra, ¿verdad?"). Así comienza una de las escenas más comentadas de la última temporada de The White Lotus, cuando Charlotte Le Bon elogia la sonrisa de su compañera Aimee Lou Wood. Esta simple línea, que la actriz improvisó, se ha convertido en un fenómeno cultural. Mientras que la mayoría de los actores en Hollywood parecen haber adoptado la perfección estética de una sonrisa ortodoncia idealizada, Wood mantiene la autenticidad de su sonrisa natural, con su distintiva separación entre los dientes frontales. Esta peculiaridad, que a muchos les parece una rareza, se ha convertido en un símbolo de rebelión en un mundo dominado por la estandarización de la belleza dental.
En un artículo reciente de The New York Times se explora cómo la presión por tener dientes perfectos se ha convertido en una tendencia dominante en la industria del entretenimiento, especialmente a medida que las redes sociales y la cultura de los influencers amplifican las expectativas estéticas. Según la dentista estética Sarah Hahn, en la era de la perfección visual, las carillas dentales se han convertido en la nueva norma. En los primeros años de programas como The Real Housewives y Keeping Up with the Kardashians, las sonrisas excesivamente blanqueadas y las carillas ultraperfeccionadas se hicieron populares, llegando a ser casi sinónimo de estatus social y éxito.
La "sonrisa copia y pega", como la denomina Hahn, ha sido el modelo a seguir para una gran parte de la sociedad, en especial entre las celebridades. La famosa odontóloga Joyce Kahng, especializada en estética dental, ha notado un aumento en la demanda de carillas tras 2020, gracias al "efecto Zoom". Este fenómeno se refiere a cómo, al estar más tiempo frente a las pantallas, la gente comenzó a examinarse más a sí misma y a criticar detalles que antes no les preocupaban. La influencia de las celebridades y los influencers ha sido clave en esta dinámica. Como explicó Kahng en The New York Times, "cuando los influencers empezaron a hacerse carillas, la gente común empezó a seguir el ejemplo".
Pero la perfección dental también ha generado su propia resistencia. Si bien muchos aún aspiran a la sonrisa perfecta, hay quienes se sienten incómodos con esta homogeneización visual que está dominando la televisión estadounidense y el cine. Sue-Ann Jarrett, residente de Brooklyn, señaló que la televisión estadounidense está empezando a ser "visualmente muy homogénea". "Siento que mucha gente está empezando a verse igual", expresó. De hecho, algunos espectadores y fans de The White Lotus han comenzado a ver con nuevos ojos la sonrisa de Aimee Lou Wood, quien, al contrario de lo que la mayoría de los actores y celebridades hacen, no ha optado por transformar sus dientes.
Shedika Williams, otra residente de Brooklyn, compartió sus sentimientos de arrepentimiento por haberse sometido a un tratamiento de ortodoncia al ver la sonrisa natural de Wood. En plataformas como TikTok, los usuarios también se han sumado a esta reflexión, especialmente al ver vídeos de transformaciones dentales que, en algunos casos, muestran cómo los dientes "originales" parecen más auténticos. La artista y esteticista médica Emma Dickson, quien también comparte la característica de tener un pequeño espacio entre los dientes frontales, declaró que ver la sonrisa de Wood le resulta "reconfortante". Sin embargo, también subrayó que la crítica a los dientes perfectos podría estar enraizada en la presión para que todos los actores se ajusten a un estándar estético global.
La paradoja de la perfección dental
Una de las paradojas de este fenómeno es que, por un lado, las carillas y los dientes perfectos son considerados un símbolo de belleza y éxito, pero por otro, quienes se resisten a esta norma están comenzando a ser vistos como subversivos. Aimee Lou Wood misma ha comentado en entrevistas cómo se siente un poco "rebelde" por no seguir las tendencias de Hollywood y optar por una sonrisa natural. En una entrevista reciente con The Hollywood Reporter, la actriz explicó que mientras sus compañeros de reparto provienen de un mundo tan diferente, ella mantiene una mentalidad británica más reservada y autocrítica. "Vengo de un pequeño apartamento en el sureste de Londres y estoy tan influenciada por la sensatez británica que no sé cómo manejar estar rodeada de personas tan seguras de sí mismas", explicó.
Para los críticos de la perfección dental, como la dentista Kahng, el problema no radica en las carillas en sí mismas, sino en cómo se han convertido en una forma de presión social. "Si te empiezas a enfocar en los dientes de alguien que nunca se preocupó por ellos, eso crea una inseguridad donde no existía antes", comentó Kahng en el artículo de The New York Times. Esto puede llevar a las personas a modificar su apariencia, incluso si nunca sintieron la necesidad de hacerlo.
La belleza de la imperfección
El fenómeno de la "sonrisa perfecta" refleja una tendencia más amplia en la cultura contemporánea: la obsesión con la perfección visual. Pero también está surgiendo un movimiento que celebra las imperfecciones y la autenticidad. A medida que los consumidores y las audiencias en general se alejan de las imágenes artificiales que las redes sociales fomentan, hay una creciente apreciación por las sonrisas imperfectas, como la de Aimee Lou Wood. Como explicó Sarah Hahn, es vital educar al público sobre las razones detrás de las elecciones dentales de las celebridades, no para criticar, sino para proporcionar contexto sobre los estándares impuestos en la industria del entretenimiento.