Belleza
Esta es la mejor hora para tomar el sol y ponerse moreno sin quemarse: sigue estos consejos
- Es importante exponerse al sol con responsabilidad y precaución
- Además de a nivel estético, la luz solar ayuda a la piel a que produzca vitamina D
- No hay que olvidar los riesgos de la exposición excesiva al sol
elEconomista.es
Tomar el sol puede ser beneficioso para nuestra piel, pero también tiene sus riesgos si no se tiene precaución. El sol puede llegar a ser demasiado abrasador y podríamos quemarnos o sufrir golpes de calor. Por ello, es importante exponerse al sol con responsabilidad y precaución.
¿Cuál es la hora ideal para tomar el sol?
El primer punto sería comentar las peores horas para tomar el sol. Entre las 12 del mediodía y las 17 de la tarde es cuando hay mayor riesgo de quemarse porque los rayos nos alcanzan de una manera más directa.
Estas horas son más perjudiciales todavía para las personas que tienen un tipo de piel sensible como puede ser en el caso de las personas rubias o pelirrojas. Si decidimos tomar el sol durante esas horas es importante utilizar protector solar y que el tiempo de exposición no sea demasiado prologado.
Por lo tanto, las horas más apropiadas son desde que amanece hasta las 11 de la mañana y desde las 18 de la tarde hasta el anochecer. En esos momentos del día podemos aprovecharnos de los beneficios del sol, pero sin tanto riesgo de quemarse. Existen otras horas como son de las 11 a las 12 y de las 17 a las 18, que, aunque no sean las más ideales, tampoco son tan perjudiciales.
Pero, aunque estemos dentro de las horas de sol ideales, no debemos olvidar la protección solar y de estar bien hidratado. Otro punto importante es que, aunque el cielo este nublado, podemos quemarnos igualmente.
¿Qué riesgos tiene tomar demasiado el sol?
La exposición al sol tiene muchos beneficios, pero también algunos riesgos si no se realiza con precaución.
Lo primero es que la exposición excesiva al sol puede aumentar el riesgo de cáncer de piel, cuando la luz ingresa a las células de la piel puede dañar el material genético (ADN) que se encuentra en su interior. Los daños en el ADN pueden causar cambios en las células y hacer que crezcan y se dividan. Este crecimiento puede provocar grupos de células conocidos como tumores o lesiones que pueden ser cancerosos o inofensivos.
La radiación UVA es la responsable del bronceado en nuestra piel, pero también puede provocar alteraciones en la piel como arrugas o envejecimiento prematuro. También puede provocar quemaduras solares o ampollas.
Según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) realmente el bronceado es una resultado que se produce por el daño en la piel. Es decir, cuando los rayos penetran en la piel esta se protege produciendo más pigmento.
La exposición excesiva y sin protección al sol puede provocar los siguientes problemas en la salud:
- Envejecimiento prematuro
- Aparición de manchas
- Daño ocular
- Queratosis actínica
- Sistema inmunitario debilitado
¿Cuáles son los beneficios de tomar el sol?
La luz solar ayuda a la piel a que produzca vitamina D que es necesaria para la función normal de los huesos y la salud. Científicamente el sol es necesario para nuestra salud:
- Mejora el sueño: La luz solar regula el ritmo circadiano diciéndole al cuerpo cuando aumentar o disminuir los niveles de melatonina.
- Reduce el estrés: La melatonina también ayuda a reducir el nivel de estrés.
- Fortalece el sistema inmunológico: la vitamina D es fundamental para nuestro sistema inmunológico y una exposición constante al sol ayuda a fortalecerlo.
- Mejora el estado de ánimo: la luz del sol aumenta el nivel de serotonina en el cuerpo y la serotonina ayuda a mejorar el estado de ánimo.