El truco de meter un huevo en agua para saber si está malo

La Unión Europea está investigando un brote de salmonela en seis países relacionado con huevos españoles. Se trata de un de los alimentos más peligrosos, su consumo cuando están malos puede acarrear graves problemas para la salud. Hay un truco fácil y sencillo para comprobar el estado del huevo.

Se trata únicamente de introducirlo en un vaso de agua. Si el huevo se hunde y se queda en el fondo es apto para el consumo humano, sin embargo, si flota y permanece en la superficie el huevo está en mal estado.

Puede parecer más un remedio de la abuela que una prueba infalible, pero la realidad es que el truco cuenta con el visto bueno de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

A simple vista también se puede observar ciertos aspectos que son motivo de alarma. La OCU desaconseja el consumo de huevos que tengan pequeñas pequeñas grietas, ya que podrían originar riesgos sanitarios. Además, no debe presentar olores desagradables. 

Si el huevo está en bueno estado, la OCU recomienda una serie de consejos y prácticas para evitar los mayores riesgos posibles. Como, por ejemplo, no lavar los huevos (la humedad podría contaminarlos), guardarlos en la nevera y romperlos siempre sobre una superficie diferente a la que van a ser cocinados para con contaminar la yema con los residuos que pueda haber en la cáscara.