Retail - Consumo

El dueño de Burger King espera superar los mil locales en España y llegar a 15 Popeyes en Italia este año

Restaurante de Burger King.

Javier Mesa

Restaurant Brands Europe (RBE), masterfranquiciado de Burger King en España y Portugal, aspira a mantener su ritmo de crecimiento orgánico en 2025 a pesar de la ralentización del consumo en hostelería y alcanzar la cifra de 1.000 locales de la marca en nuestro país este año.

Así lo ha manifestado el consejero delegado del grupo de restauración español, Borja Hernández de Alba, durante el 50 aniversario de la apertura del primer restaurante de la cadena estadounidense en la madrileña Plaza de los Cubos, también pionero de la marca a nivel internacional.

En un contexto económico de incertidumbre, ha asegurado el directivo, las perspectivas de crecimiento en este ejercicio siguen siendo positivas para el segmento de restauración rápida, especialmente en comparación con la hostelería tradicional. En este sentido, el directivo aclara que la compañía tiene una clara vocación de crecimiento, "con un fuerte enfoque en la expansión orgánica a través de la apertura de nuevos restaurantes, entre 80 y 90 al año", aunque sin descartar adquisiciones de unidades franquiciadas que no quieran dar continuidad a su negocio.

Tras avanzar que sus esfuerzos en expansión se extienden a la cadena de pollo frito Popeyes, que gestiona también como masterfraquicia para el mercado ibérico, además de Italia, el consejero delegado de RBE ha avanzado que el grupo tiene como objetivo aumentar de cinco a 15 el número de unidades operativas en el mercado transalpino antes de que finalice el año. Así, Hernández de Alba ha especificado que a finales de este ejercicio o comienzos del que viene empezarán a operar con esta marca en el mercado italiano a través de franquiciados locales, en el que aterrizaron en 2024, además de con establecimientos propios.

En cuanto a la posibilidad de instalarse como gestor de locales de Burger King también en Italia, Hernández de Alba ha reconocido que se trata de un mercado prioritario para la compañía y en el que los restaurantes propios de Popeyes están funcionando muy bien. Sin embargo, el directivo descarta a corto plazo la posibilidad de entablar conversaciones con la empresa que gestiona los derechos de Burger King en el país, aunque se ha mostrado abierto a ofrecer una salida a través de RBE, al igual que en España, a franquiciados interesados en dejar de gestionar sus restaurantes de la enseña si surgiera esta oportunidad.

En cuanto a la evolución del negocio de la compañía, el directivo ha asegurado que mantienen el objetivo de alcanzar los 2.000 millones de facturación tras un "buen primer semestre con números positivos tanto en tráfico como en ventas". Sin embargo, ha añadido que el cumplimiento de la meta anual dependerá fuertemente de los resultados del segundo semestre del año, ya que los meses más importantes para el grupo suelen ser julio, agosto y diciembre.