Retail - Consumo

El grifo de cerveza sostenible digno de los salones de un palacio real

Miguel Ángel Fernández, responsable de I+D en instalaciones de barril de Heineken España.

Javier Mesa

Cuando los maestros vidrieros que se instalaron en el pequeño taller de la localidad segoviana de San Ildefonso para fabricar los cristales y los espejos que habrían de abastecer al futuro Palacio Real de La Granja, no imaginaban que cuatro siglos después sus hornos servirían para crear un grifo de cerveza.

El germen industrial creado por estos artesanos contribuyó a dar esplendor a los salones y comedores del palacio de recreo de Felipe V, primer monarca de la dinastía Borbón en España, tras convertirse en la Real Fábrica de Cristales de La Granja. Tras una larga trayectoria iniciada en 1727 y, miles de lámparas y espejos después, sus hornos han servido para crear una edición limitada de 150 columnas cerveceras, elaboradas artesanalmente con 1.000 kilos de vidrio reciclado de las botellas de Heineken.

La multinacional neerlandesa, con 150 años de historia a sus espaldas, ha apostado por otro centro histórico para dar una segunda vida a las icónicas botellas verdes de la marca en una columna fabricada por 0,9 kilos de vidrio reciclado por cada año de fabricación de cerveza.

Los artesanos de la fábrica segoviana han empleado para dar forma a estas columnas el tradicional método de soplado de vidrio y el corte de precisión, lo que hace que cada columna sea una pieza única, con pequeñas imperfecciones que le otorgan un carácter exclusivo.

Además de la artesanía segoviana que ha dado forma a la parte frontal de la columna, los nuevos grifos de edición limitada de Heineken incorporan un sistema de tiraje de última generación en la parte posterior donde se encuentran su estructura metálica estándar y los conductos. Este diseño modular, recuerda la compañía, les permitirá en el futuro reutilizar la estructura para otras actualizaciones estéticas, aumentando así el perfil circular y sostenible de su iniciativa.

Aunque estas creaciones se instalarán en una selección de establecimientos hosteleros embajadores de Heineken en ciudades como Barcelona, Madrid, Valencia, Málaga o Sevilla, los más curiosos ya pueden conocerla de cerca en el primero de estos locales, Azotea Cibeles, el proyecto que gestiona Azotea Grupo en el Palacio de Cibeles que desde hace años sirve de sede al Ayuntamiento de Madrid.