El precio del trigo y el maíz se hunde en plena crisis del campo en Europa
- El maiz se abarata un 34% y el trigo un 29%
- El campo protesta ante la entrada de producto ucraniano sin arancel
Javier Romera
Tras las fuertes subidas registradas tras el inicio de la guerra de Ucrania, el precio de los cereales se ha desplomado en el último año en los mercados internacionales. Según los datos recogidos por Bloomberg, las caídas las lidera el maíz, que en los últimos doce meses se ha abaratado un 34,3%. Del mismo modo, el precio del trigo ha bajado un 29% y el del trigo para molienda un 25,9%. El aceite de soja, por su parte, ha bajado un 27% y la harina de soja hasta un 25%.
El sector agrario está sumido tanto en Europa en general como en España en particular un malestar creciente debido a las difíciles condiciones y asfixiante burocracia que generan las normativas de la UE. Entre otras razones, según explican desde la FAO, la organizaciones de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, los precios caen "debido a la fuerte competencia entre los exportadores y a la llegada de suministros recién cosechados a los países del hemisferio sur". De fondo, no obstante, está también la entrada masiva en Europa de grano procedente de Ucrania, uno de los mayores productores del mundo, sin pagar aranceles, lo que impulsa a la baja los precios.
La Comisión Europea ha propuesto extender hasta el próximo 5 de junio de 2025 la suspensión de los aranceles a las exportaciones ucranianas, pero ante las protestas desatadas contempla contempla ciertas salvaguardias para dar respuesta no solo al campo sino también a las inquietudes mostradas por Polonia, Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia y Hungría, que están sufriendo las presiones del grano ucraniano en los mercados locales.
Las concesiones de Bruselas
El Ejecutivo comunitario ha propuesto reactivar los aranceles en caso de perturbaciones en los mercados de la Unión Europea y eliminar la obligación de dejar en barbecho las tierras de cultivo para intentar frenar las protestas del campo, pero estas, de momento, no se detienen. En un comunicado conjunto esta semana las tres organizaciones agrarias, Asaja, Coag y UPA, explicaron que "los agricultores luchan frente a un mercado desregulado que importa productos agrarios de terceros países a bajo precio que presionan a la baja los de la Unión Europea".
Según dicen, estas producciones extracomunitarias "no cumplen las normativas internas europeas y representan una contradicción e hipocresía en la actuación política de Bruselas, entre la política comercial y la política agraria común propia". Entre los agricultores existe ahora una gran preocupación por el acuerdo de libre comercio que Europa está negociando con Mercosur. Supondrá, según dicen, un golpe más.