Retail - Consumo

La marca blanca acapara el 70% de los yogures y fuerza a Danone a bajar precios

Un paquete de yogures de Danone

Javier Romera

El fuerte crecimiento que está experimentando en España la marca blanca está forzando a la industria a bajar sus precios para no perder ventas. Es lo que le ha ocurrido por ejemplo a Danone, que la semana pasada anunció además el cierre de su fábrica en la localidad barcelonesa de Parets del Vallès. Las enseñas de las cadenas de supermercados se han hecho con el 70% del mercado en el caso de los yogures y más del 77% en el del total de los postres, por lo que a la compañía no le ha quedado más remedio que mover ficha.

En febrero del año pasado la empresa lanzó ya una promoción de un paquete de yogures a un euro con el objetivo, según dijo, de "estar al lado de las familias en un momento muy complejo para la economía de muchos hogares" y, según confirman ahora desde el grupo, este año se va a mantener la misma estrategia. "Además de mantener la promoción de los yogures, hemos reducido los precios también del resto de productos", confirman desde Danone.

Aunque evitan hablar de cuotas, sí que reconocen que el objetivo que se persigue con ello es recuperar volumen de ventas, aunque sea a consta de su margen. La asociación de fabricantes y distribuidores Aecoc asegura, de hecho, que el sector del gran consumo solo está repercutiendo un tercio del incremento de los costes de producción, que supera en algunos casos hasta el 70%.

La expulsión de PepsiCo

Frente a la decisión de Danone de bajar sus precios, se ha producido también un caso inverso: la expulsión de los productos de PepsiCo de los supermercados de Carrefour ante "una subida de precios inaceptable", según denunció la cadena francesa. Ahora, y ante el empuje de la marca blanca, el fabricante de refrescos está fabricándola también en lo que supone una decisión inédita para Mercadona. Unos y otros mueven en cualquier caso ficha después de que la participación de la marca blanca haya superado de media el 46% del mercado, según los datos de la consultora NIQ, la antigua Nielsen. Es un nivel nunca visto y que sitúa al mercado español solo por detrás de Suiza en cuanto a penetración de la marca blanca.

Según un informe de Capgemini al 70% de los consumidores les gustaría que las empresas minoristas bajaran más los precios de los productos que venden y un 73% se muestra dispuesto ser más leales y consumir más en el futuro en aquellos operadores que les apoyaran en estos momentos de dificultad actuales. Asimismo, un 65% reclama a los comercios que informen en caso de que los fabricantes apliquen modificaciones que afecten al tamaño o calidad del producto sin variar el precio como la "reduflación", tal y como ha hecho en los últimos meses Carrefour en sus tiendas francesas.