Vicio nombra presidente a Aleix Puig para encarar su expansión internacional
- Su socio y cofundador Oriol de Pablo asumen el cargo de director general
- Vicio prepara su crecimiento desde una nueva oficina de cuatro plantas con toboganes
Javier Mesa
La cadena de hamburguesas Vicio acaba de anunciar que reestructura su cúpula de cara al importante proceso de internacionalización que quieren desarrollar en los próximos años. Así, la imagen más reconocible de la marca, el ex ganador de MasterChef, Aleix Puig, pasará a ser presidente de la marca, mientras que su otro cofundador, Oriol de Pablo, quedará como único consejero delegado a partir del 1 de diciembre.
El nombramiento, aprobado por unanimidad por el Consejo de Administración de la compañía, implica que Aleix Puig asume un nuevo reto como es el de exportar y replicar en el resto del mundo el éxito de la marca, que suma actualmente 23 puntos de venta en Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga, Valencia y Palma de Mallorca.
El nuevo presidente de Vicio ha asegurado: "Cuando hace tres años iniciamos este proyecto en un garaje de Sants, aunque teníamos todas las ganas y ambición del mundo, nunca imaginamos que 36 meses más tarde estaríamos en 10 ciudades. Hemos logrado mucho hasta ahora pero todavía queda mucho por hacer. No hay límites, el objetivo no es ni más ni menos que darle lo suyo al mundo entero".
Este anuncio llega casi dos meses después de que la marca inaugurara en Madrid su primer local con servicio en mesa, además de reparto a domicilio y takeaway, un formato que esperan replicar con otros 15 locales en los próximos 12 meses. En aquella ocasión, Puig avanzó que Vicio espera duplicar este año su facturación hasta alcanzar los 40 millones de euros.
El nuevo modelo de establecimiento de Vicio dispone de unas cocinas sobredimensionadas para funcionar como unidades capaces de atender una demanda omnicanal y convertirse en una marca global a nivel mundial, "algo similar a lo que fue Pachá en el mundo de los clubes, pero en el de las hamburguesas", según Puig.
A mediados de septiembre, y también con el horizonte de un gran crecimiento del negocio global de la compañía, sus responsables trasladaron sus oficinas a una nueva sede central en Barcelona, con más de mil metros cuadrados distribuidos en cuatro plantas, situada en el inmueble del antiguo teatro Helena del Barrio de Gracia.