Política

Putin reconoce que quería al magnate en la Casa Blanca

  • La injerencia electoral de Rusia en la campaña, centro de la cumbre
Trump y Putin. Foto: Reuters

José Luis de Haro

Un acercamiento de posturas después de que la relación entre Washington y Moscú "nunca haya sido peor que ahora", reconocía el propio presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ayer se vio cara a cara en Helsinki, Finlandia, con su homólogo ruso, Vladimir Putin. Una cumbre donde se produjo un diálogo "directo y profundamente productivo" entre ambos líderes, según reconoció en inquilino de la Casa Blanca, quien dejó claro que las relaciones entre la Casa Blanca y el Kremlin mejoraron tras su encuentro.

Sin embargo, pese a que los asuntos sobre la mesa en el Palacio Presidencial fueron variados, desde la anexión de Crimea, el acuerdo de Minsk, Siria o la carrera armamentística entre ambos, la rueda de prensa de los dos mandatarios giró alrededor del papel jugado por Rusia en las elecciones presidenciales de EEUU. Como viene siendo habitual, ambos negaron la interferencia directa del Kremlin. "Pasamos mucho tiempo hablando de ello. El presidente Putin tiene una opinión muy clara", recalcó Trump sin ofrecer más detalles al respecto. "La investigación estadounidense el papel de Rusia es un desastre para nuestro país", puntualizó. 

Por su parte, el presidente ruso generó cierta polémica al reconocer abiertamente su preferencia por el republicano como vencedor de la contienda electoral de 2016. "Como he repetido, Rusia no tuvo ninguna participación en las elecciones", comentó, y dijo que las pruebas en contra de su Gobierno no tenían sentido. "Muéstrenme una sola señal de la interferencia de Rusia en las elecciones", retó Putin quien contestó con un claro "sí" a la pregunta de si deseaba que Trump fuera el presidente de EEUU.

Previamente, y antes de su reunión, Trump ya había anticipado sus intenciones de mejorar unas relaciones que, según consideró, se habían distanciado en los últimos años por los errores de sus antecesores en la Casa Blanca.